José Salazar/ Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- Si tu perro consume grandes cantidades de agua y orina más de lo normal, además de que luce decaido y con falta de apetito, es probable que padezca de insuficiencia renal.

“La insuficiencia renal en perros se desarrolla paulatinamente por años sin presentar síntoma alguno, y normalmente la sufren los mayores de cinco años. Lamentablemente este tipo de fallas rara vez logran curarse”, explicó Giselle Sánchez Palomo, Médico Veterinario Zootecnista del Hospital Universitario para Perros y Gatos de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady).

Advirtió que en ocasiones, los dueños ocasionan este daño a sus mascotas, ya que ante alguna lesión, se les administra medicamentos que comúnmente usan los humanos, como ibuprofeno, naproxeno, paracetamol, piroxicam, aspirina, entre otros.

“El daño renal que causan estos fármacos es en la mayoría de las ocasiones letal, ya que no pueden metabolizarlo como lo hacen los humanos. Los perros son altamente susceptibles a intoxicación por este tipo de fármacos. Una tableta es suficiente para causarle la muerte al animal”, aseveró la especialista en Medicina Veterinaria.

Entre las razas predispuestas a padecer enfermedad renal se encuentran Sharpei, Poodle, Doberman, Golden Retriever, Gran Danés, Bulldogs y Yorkshire Terrier.

“Cuando los perros presentan daño renal, al principio comienzan a beber más agua de lo habitual y orinan de forma más frecuente. En etapas avanzadas presentan vómitos con sangre, diarrea, mal aliento, úlceras en la boca, lengua y piel, sangrados espontáneos, decaimiento, dolor; y en etapas terminales, dejan de orinar e incluso convulsionan”, detalló la doctora Giselle Sánchez.

No existe cura

Añadió que esta enfermedad no tiene tratamiento. De hallarse en etapas tempranas, se pueden realizar algunas acciones para alentar el progreso del padecimiento. Si se encuentra en etapas tardías el pronóstico es fatal para la mascota. 

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Sánchez Palomo también recomendó evitar darles a las mascotas pasas, uvas, aguacate, chocolate, cebolla, ajo, berenjena y cerveza.

Finalmente, aconsejó que la mascota visite al veterinario, por lo menos tres veces al año, para un chequeo físico general, y en caso de requerirlo, vacunación y desparasitación.

• La insuficiencia renal se produce cuando los riñones del perro se ven incapaces de eliminar las toxinas del cuerpo, como consecuencia, no concentran la orina.
• El Hospital Universitario para Perros y Gatos de la Uady se encuentra ubicado en la calle 18  No. 160 de la colonia San José Vergel, en el oriente de la ciudad.