Israel Cárdenas/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- Los nuevos desarrollo urbanos de Yucatán deben considerar al menos dos elementos para que sus inmuebles sean funcionales: las áreas para discapacitados y edificaciones de acuerdo al clima, declaró ayer el presidente del Colegio de Arquitectos de la Zona Metropolitana de Mérida, Héctor Valdés Vidiella.

“Los elementos que se deben de tomar en cuenta es que sean edificios accesibles, en los cuales pueda cualquier persona, y en especial los discapacitados, acceder a ellos. Estamos viendo que muchas de las obras que se están haciendo, incluidos los edificios públicos, carecen de accesibilidad porque tienen escalones que impiden que pueda acceder una persona en silla de ruedas”.

El entrevistado dijo que el arquitecto actual debe considerar la accesibilidad universal en sus proyectos para que pueda darle oportunidad de uso a cualquier persona.

El calor

Agregó que otro elemento que el profesional debe tomar en cuenta es el clima, ya que esta entidad se caracteriza por sus altas temperaturas durante todo el año.

“Si yo como arquitecto proyecto un edificio con puros paños de cristal, será una edificación muy calurosa porque se necesitará que tenga demasiado equipo de aire acondicionado para tener una temperatura agradable continuamente, cuando esto se podría solucionar con espacios de ventanas en macizos de block para las áreas donde da el sol y evitar que el edificio produzca más calor”.

El presidente del Colegio de Arquitectos consideró que los profesionales pueden tomar en cuenta en sus proyectos los elementos del entorno cultural de la entidad.

“Si yo hago una casa colonial y la copio exactamente como era en aquella época, a lo mejor no se adapte al uso actual, pero si toco ciertos elementos como el patio central y pasillo con columnas para darle ventilación a las casas, puede resultar beneficioso para la obra”.

Valdés Vidiella agregó que Mérida está creciendo con desorden porque cuenta con un reglamento de desarrollo urbano obsoleto. Al respecto agregó que entregaron una propuesta a la Dirección de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento de Mérida pero que a la fecha no han recibido ninguna respuesta.

“Tenemos que actualizar las leyes y reglamentos que rigen el desarrollo de la ciudad para poder tener un control sobre el crecimiento de la ciudad”, dijo el entrevistado.

Premiación

Por sus aportaciones a la arquitectura local que van desde el Gran Museo del Mundo Maya hasta el Hospital Regional de Alta Especialidad, el Colegio de Arquitectos de la Zona Metropolitana de Mérida premiará a Enrique Duarte Aznar en el marco del Día Nacional del Arquitecto.

El presidente del Colegio, Héctor Valdés Vidiella dijo ayer que el próximo 1 de octubre entregarán el reconocimiento en un lugar aún por decidir.

“La designación se hace bajo la revisión de un currículum, una propuesta y análisis del arquitecto en el campo del ejercicio profesional, de la docencia, en el ejercicio social y en la práctica gremial, es decir, que pertenezca a algún colegio y bajo esa valoración la persona que obtenga más puntos se le otorga el reconocimiento”.

En rueda de prensa, el presidente de los arquitectos agregó que la entrega de premios inició hace tres años, los galardonados han sido los arquitectos Fernando López Escalante, Enrique Chávez Aguilera, Alberto Castillo Zavala y Manuel Jesus Castillo Rendón.  

Por su parte, el arquitecto Enrique Duarte Aznar, quien recibirá el premio correspondiente a 2015,  dijo ayer que el reconocimiento significa una honra y una gratitud; asimismo expuso que tiene 34 años en la profesión y que algunas de sus participaciones son la remodelación del mercado de Santa Ana; el diseño exterior de un supermercado ubicado en Paseo de Montejo; la ampliación y remodelación y ampliación del Aeropuerto Internacional de Mérida.

Asimismo el Gran Museo del Mundo Maya de Mérida; el Complejo Deportivo Inalámbrica; el Hospital Regional de Alta Especialidad; el Centro Estatal de Oncología de Campeche, entre otros.

“Yo creo que lo que fundamentalmente define el trabajo que hacemos es el valor que se le da a las preexistencias y la conciliación ponderada entre los factores que intervienen. No consideramos una obra como hecho aislado, sino la consideramos como parte de una preexistencia, sea natural como el caso del medio ambiente o sea modificada como es el caso de una ciudad”.

Agregó que el Colegio de Arquitectos de la Zona Metropolitana tiene como objetivo la promoción del campo de trabajo de los arquitectos, “propósito razonable en sí mismo, que muy favorablemente desde mi apreciación, persigue aportando y no pidiendo, como tal vez podría pensarse”.