Articular los esfuerzos individuales y convertirlos en colectivos ha sido desde el inicio uno de los principales propósitos de la Red Literaria del Sureste MéxicoNuestra América, fundada en 2007, con el ímpetu que hasta la fecha conserva. El anhelo puesto en marcha para dar cauce a nuevos senderos en el campo literario yucateco, mirando siempre desde el contexto latinoamericano y universal, herencia de grandes plumas decimonónicas como la de José Martí, autor del ensayo que da sentido a la identidad de la RLS: Nuestra América. La RLS es un complejo devenir de experiencias y pasiones que se unen en una brigada constante a favor de la literatura, rompiendo moldes y esquemas tradicionales, pues la RLS es todo, menos una cerrada esfera autocomplaciente. Desde sus primeros días en aquel café vegetariano del barrio de Santa Lucía, se planteó como característica fundacional la apertura a toda aquella persona, asociación, institución, grupo o colectivo que tuviera como voluntad contribuir a ampliar, renovar y generar caminos andados y venideros de la literatura.

Miramos a la literatura como un campo de comunicación en el cual se requiere de quien genera contenidos usando las múltiples formas del lenguaje, integrándose con quienes hacen posible que esa creación llegue a sus destinatarios; en la RLS convergen mujeres y hombres que escriben, enseñan y difunden a través de la lectura, así como quienes gestionan los espacios, abren caminos y fortalecen los escenarios literarios con acciones concretas, su tejido amalgama la diversidad en todo sentido, la respeta y pretende su multiplicación, reconociéndola como un distintivo en su quehacer. La RLS se hace a sí misma al tiempo en que ve en la diversidad de formas y pensamientos la fortaleza de la sociedad y de la literatura como reflejo. Es en sí la multiplicación de ilusiones puestas al servicio de la sociedad.

Tejer la RLS es un desvelo sin tregua, con senderos en constante renovación, con la autocrítica por delante para progresar, reconociendo en las enseñanzas que proyectan lo venidero. En su espíritu está puesto el diálogo como medio consecuente para alcanzar los objetivos planeados, con la humildad peculiar de sus integrantes que, alejados de la vileza de quienes buscan hacer comercio y mercancía, la RLS es un interminable andar entre generaciones pasadas, presentes y futuras, es puente y hoja en blanco, está llena de memorias, pues es ejercicio humanizado por medio de la belleza y el contenido de los mensajes recogidos en las múltiples formas de expresión; desde luego y como todo hecho humano, es susceptible de caer en espacios inocuos, pero por su espíritu libre y creador se renueva para ser fiel a sus postulados e integrantes.

Ese es el camino que hemos andado y seguimos edificando, desde las mañanas iníciales y junto a quienes pusieron su granito de arena a esta utopía, hasta quienes hoy con su experiencia o juventud, su voluntad y con el conjunto de esfuerzos tejidos en una sola RLS, hacen que avance y se fortalezca. La RLS es mucho más que un nombre, es la colectividad de seres humanos decididos a hacer de Yucatán un mejor lugar mediante la literatura.