Hace ya más de 15 años me convertí en una fiel fanática de la historia del niño mago con una cicatriz en la frente. En el 2011 llegó el final de aquella histórica saga, por eso, hace un tiempo, cuando se dio el anuncio de la producción de “Animales Fantásticos y dónde encontrarlos” (perteneciente al mismo universo, pero no a la misma línea temporal) los grandes aficionados nos volvimos locos.

Desde el inicio del proyecto se han presentado algunos problemas: mala recepción del público, escándalos por parte del casting, reemplazos en los papeles protagónicos y malas críticas, entre más cosas.

Esta entrega fue esperada con ansias, pues además de que pasaron varios años para poder continuar con la historia, esta producción significó el regreso de David Yates al mundo mágico, ya que de nuevo podemos verlo de director. El elenco encargado de darle vida a esta historia está conformado por Eddie Redmayne, Katherine Waterstone, Ezra Miller, Jude Law, Dan Fogler y por supuesto Mads Mikkelsen.

Este largometraje nos cuenta sobre el profesor Albus Dumbledore, quien sabe que el poderoso mago oscuro Gellert Grindelwald se moviliza para tomar control del mundo mágico. Dumbledore, todavía no tan poderoso como ya lo conocemos, es incapaz de detenerlo por sí solo y por eso le encomienda al magizoólogo Newt Scamander liderar a un intrépido equipo de magos, brujas y hasta un valiente panadero muggle para embarcarse en una peligrosa misión, durante la cual se encuentran con nuevas y conocidas bestias, además de enfrentarse con la creciente legión de seguidores de Grindelwald. Pero con riesgos cada vez mayores, ¿cuánto tiempo más podrá Dumbledore permanecer al margen?

Steve Kloves, quien participó en los guiones de prácticamente todas las películas del niño mago, regresa a la acción, en conjunto con J.K. Rowling. La historia que nos plantean suena bastante interesantes y hasta cierto punto nos parece familiar, pues nos hace pensar y comparar a Grindelwald con Voldemort.

Mads Mikkelsen, en quien se centró mayor parte de la atención, logra encarnar a un buen Grindelwald, pues consigue brindarle calidez al personaje, puedo decir que la interpretación es buena, sin embargo, sabemos que se enfrenta a una difícil tarea al ocupar el lugar Depp, a quien el público le tenía aprecio.

Claro, no podemos dejar de lado a los demás personajes: Newt, a quien siguen poniendo en segundo plano, a pesar de ser el protagonista de la saga, pero que poco a poco logra escribir su historia; Jude Law también hace un buen trabajo a la hora de encarnar a Dumbledore. La historia que nos presentan empieza a tomar forma, pero no logra reponer el daño de las dos entregas anteriores, aunque esto era claro que tomaría más de una película hacerlo. Las apuestas están divididas: por un lado, algunos dicen que la saga se convertirá en trilogía, siendo esta la última entrega de las películas; otros, dicen que seguirá hasta dar lo prometido.

Solamente queda esperar y agregarla a tu lista sin dejar pasar mucho tiempo, más que un viaje visual bastante bueno y regresar al mundo ya conocido.

Calificación: tres estrellas.