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Hoy tendremos la importante visita a nuestra ciudad de la Imagen Peregrina Internacional del Centenario de Nuestra Señora de Fátima, que fue bendecida por el Papa Francisco en enero de 2017, en ocasión del Año Jubilar por las apariciones de la Virgen María en Portugal a cien años de distancia.

Nos emociona que Mérida esté en el mapa de la gira, ya que la Alianza de la Sagrada Familia Internacional (ASFI) ha patrocinado la producción de seis imágenes -una para cada continente- y encontró tierra fértil para recibirle y lo haremos de manteles largos.

Esta bendita imagen, si bien sabemos que no es la Virgen María en persona real, sí lo es en cuanto que su imagen nos refiere a Ella misma, y es a través de esa presencia tangible para nosotros, simples humanos que precisamos de signos sensibles que “nos dejamos tocar” por las gracias que Ella tiene. Quienes nos consideramos sus hijos y tenemos fe, asistir a honrar esta presencia es lo que le da vida.

El Papa Francisco, en un video dirigido a quienes reciben la imagen peregrina, nos recuerda que es la Diócesis quien recibe a la Madre, Ella nos viene a visitar, a decirnos que nos quiere y nos cuida. Nos invita a recibirla porque no viene sola, nos trae un regalo, ya que toda su vida fue darse, y lo más importante es que por Ella tenemos a Jesús. Nos dice también que Ella como buena madre nos junta, hace los arreglos, se mete en cada uno de nosotros para llevarnos a Jesús.

El Papa refiere que la Virgen dijo muy poquitas cosas; por ejemplo, en la Anunciación dijo: “Hágase en mí”, y en las Bodas de Caná dijo a la gente: “Hagan lo que Él les diga”. María no es mujer absoluta, es la madre de Jesús, de Dios.

Aunque para algunos parezca que Ella es el centro, en realidad no lo es, pues en el centro, en su regazo, tiene a Jesús.

El Papa os refiere en un cuadro que María es como la escalera de quien desciende para nosotros Jesús y que ella es quien nos ayuda a ascender hacia Él. Nos recomienda que cuando tengamos su visita le agradezcamos el habernos traído a Jesús, pero también le demos las gracias por ese mandamiento que nos hace a todos sus hijos en Caná.

Termina diciendo que la recibamos y le hagamos fiesta a Nuestra Madre, y en Yucatán así lo haremos, por lo que todos están invitados a recibirle en el atrio de la Santa Iglesia Catedral, en el corazón de la capital, en donde un trío tocará para que le cantemos. Queremos hacer muy linda esta recepción, de modo que a las mujeres se nos invita a asistir de terno o hipil para que las flores multicolores de nuestro hermoso traje regional le den galanura al momento y sirvan de ofrenda.

Lo más importante de esta visita es el mensaje de oración y reparación y cómo se puede vivir a través de la Comunión de Reparación con sus cuatro elementos C.R.E.A, a saber: Confesión, Rosario, Eucaristía y Adoración.

La cita es a las 10:00 horas en el atrio, a las 10:30 rezaremos el Rosario, a las 11:15 tendremos la Santa Misa y luego se hará la Adoración al Santísimo Sacramento. Terminando la veremos partir hacia su nuevo destino. Desde las 7:00 horas habrán confesiones.

¡Dejémonos tocar por la presencia de una Madre Amorosa que solo quiere lo mejor para nosotros!

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