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Hoy vamos a comentar el tema de la basura, que aparentemente no tiene que ver con la arqueología, pero que es fundamental porque de los desechos de esa civilización se pueden deducir patrones del comportamiento humano.

En los sitios arqueológicos, cuando realizamos las exploraciones de manera integral, identificamos áreas donde podemos detectar una mayor concentración de materiales acumulados. Nuestra labor es el registro detallado de dichos materiales, que a la visita destacan por la cantidad y la diversidad. Es decir, en las esquinas y en la parte posterior de los edificios podemos encontrar esta cantidad de materiales, que consisten en muchos fragmentos de vasijas cuya tipología expresa diversas formas, con variados diseños, diferente decoracion y diversos tamaños. Otros materiales pueden ser malacates completos y fragmentados que sirvieron para hilar algodón.

También hallamos fragmentos de piedra caliza que formaron parte de herramientas de molienda, de aperos para el cultivo y de albañilería. Otros materiales hay en esos sitios, como el sílex, que es una piedra más dura que servía como herramienta punzocortante de uso común.

Asimismo materiales diversos, como la obsidiana, se encuentran como núcleos de los que se extrajeron navajillas para cortar o también los mismos fragmentos de herramientas que se fragmentaron durante el proceso de afilado.

Otros desechos que se recuperan durante las exploraciones son los fragmentos de huesos de humanos, de aves, cuadrúpedos y roedores, que hay que identificar para determinar la especie y deducir la dieta y los huesos reutilizados para elaborar orejeras, collares y demás elementos de ornamentación personal.

Materiales ajenos a la región que pueden recuperarse son fragmentos de turquesa, cuentas del mismo material, alabastro, caracol, concha, etc., que son materias primas que se empleaban para elaborar elementos ornamentales, como parte del ajuar de la elite. Tan solamente con el estudio y el análisis de los desechos recuperados en las excavaciones se pueden deducir patrones de comportamiento, el estatus social de las personas que habitaron las edificaciones, la dieta y las relaciones comerciales con otras regiones a partir del tipo de materiales traídos de fuera.

Es aún más interesante identificar los cambios con el proceso de almacenar la basura a lo largo de los periodos cronológicos y de ocupación de los asentamientos arqueológicos.

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