Cualquier persona puede dejar que su vida poco a poco sea desagradable por no saber que puede manejar lo que piensa. Generalmente creemos que para “grandes males, grandes remedios”. A veces puede ser así, pero recordemos que un pequeño cambio, un pequeño paso es capaz de provocar un gran resultado.

El cerebro humano es la máquina más compleja que se conoce y las partes que lo componen parecen muy pequeñas; sin embargo, este maravilloso órgano es capaz de producir miles de millones de pensamientos. Generalmente nuestros pensamientos son juicios y opiniones acerca de la vida que llevamos y la mayoría de las veces de manera inconsciente. Por esto es importante estar atentos a lo que estamos pensando para no atascarnos en pensamientos negativos, como descalificarse a uno mismo como culpable o víctima, etc.

Recuerda que nosotros elegimos qué y cómo pensar. En el diálogo interno, es decir de ti-contigo, no permitas dejarte llevar por la frustración ante las diversas situaciones. Podemos escoger sentirnos bien a pesar de sucesos desagradables, que nos molestan, y constatar los buenos resultados que se obtienen al manejar la “línea” del pensamiento. Luego entonces, pensamientos más equilibrados, inteligentes, con optimismo y esperanza dan mejores ideas, mejores estados de ánimo, mejores resultados, MEJOR VIDA.

Tenemos la capacidad de elegir cómo pensamos. Para lograrlo lo primero es distanciarnos de nuestros pensamientos para darnos cuenta de que nosotros los creamos. No somos nuestros pensamientos.

¿Te das cuenta de la diferencia? Si no fuera así, no podríamos cambiar de opinión, que es uno de los derechos fundamentales de nosotros como seres humanos.

A veces, los pensamientos son tan rápidos y tan inconscientes que es necesario hacerlos conscientes, es decir, fijarnos por dónde van para poder cambiarlos y manejarlos dándonos cuenta de que siempre es uno mismo quien los crea como reacción a algo que nos ha ocurrido o que está ocurriendo a nuestro alrededor.

Muchas cosas pueden provocarlos, pero hay que saber que siempre es uno quien puede tomar la decisión de pensar de tal o cual manera. Se pueden manejar mejor las diversas situaciones de la vida si elegimos pensamientos inteligentes y optimistas que nos lleven a actuaciones positivas para salir adelante airosamente.

Al llevar las riendas de nuestros pensamientos somos dueños de nuestra mente y gozamos de la libertad de ser.

Aunque no estemos pasando por alguna situación extrema, podemos gobernar siempre el timón de nuestro barco, el pensamiento, en lugar de dejar que vaya a la deriva. ¡Los resultados son asombrosos!

¡Ánimo!, hay que aprender a vivir.