|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Para que recibas los regalos de la vida tienes que pedirlos y creer que eres digno de recibirlos.- Wayne Dyer, psicólogo

Dar forma al propio destino es, para quien ha dominado el arte de pedir, decidirse y así obtener lo que se quiere. Hay que aprender a pedir apoyo de muchas formas. Solos no podemos alcanzar nuestras metas. Siempre se logran con la interacción, la ayuda y la colaboración de otros. Hay que saber pedir lo que se necesita; pedimos tiempo, instrucción, educación, preparación y oportunidades. Desde aprender a cantar, a pintar, arreglar el auto, orientación, etc.

Muchas veces encontramos maestros de vida en nuestro camino para aclarar nuestros sueños, descubrir la misión, pedir con eficacia, claridad, objetividad, creatividad... Pedir información, guía y retroalimentación para evaluar cómo vamos para lograr algún objetivo. Nos acercamos a quienes tienen más experiencia para preguntar y escuchar con atención.

No es tan fácil aprender a pedir, hay que pasar por la sensación de torpeza que todos tenemos cuando estamos aprendiendo a pedir lo que queremos y necesitamos. A todos se nos presentan los mismos obstáculos como: ignorancia, temor, orgullo, pensamientos de poca autovalía… Sin embargo, al afrontar esos pensamientos y sentimientos, los superamos y seguimos adelante con la tarea de crear nuestra vida.

Si crees que te lo mereces, pides con seguridad, ya que sabes que vas a recibir lo que pides. Algunos le llaman fe, otros, confianza en uno mismo. La creencia de que sí es posible nos impulsa a la acción. No es que no se tenga temor, lo que hace la diferencia es actuar a pesar de los miedos. Cuando se es experto en pedir se tiene en cuenta que no se obtiene todo a la primera. Sencillamente se aprende de las experiencias.

Podemos hacer que muchas cosas sucedan si nos comprometemos y persistimos en nuestra actitud positiva. “Milagros” suceden todos los días. Recordemos que no siempre se recibe lo que se pide pero NUNCA se recibe lo que no se pide.

Primero: tienes que imaginar lo que quieres; ser específico; cuantos más detalles, mejor.

Segundo: tienes que convencerte de que lo mereces.

Tercero: tienes que creer que lo puedes obtener.

Cuarto: tienes que tener la valentía para pedirlo.

El poder de la mente para crear es enorme. Una vez que uno se compromete a lograr algo, la mente ideará cómo obtenerlo. La paradoja de la vida es que casi nunca sabemos cómo obtener algo hasta que nos comprometemos a lograrlo o tenerlo. ¡Obtenemos lo que verdaderamente queremos obtener! Por experiencia propia, te lo garantizo.

¡Ánimo!, hay que aprender a vivir.

Lo más leído

skeleton





skeleton