El pasado 15 de septiembre, en la sesión solemne del Cabildo meridano, la ex gobernadora de Yucatán, Dulce María Sauri, señalaba que era importante que el panismo yucateco vaya en alianza con el PRI para ser competitivos, y advertía que el Gobierno Federal va a realizar cualquier tipo de acciones para tratar de ganar las elecciones.

El pasado domingo 22 de octubre, el gobernador Mauricio Vila, al terminar la reunión con el sistema PAN, reafirmó el liderazgo del alcalde de Mérida, Renán Barrera, para encabezar la estrategia política de transformación de Yucatán, así como la de Cecilia Patrón para coordinar los trabajos en Mérida. El mandatario estatal dejó en claro que el Alcalde de la capital tiene toda la confianza para que sea el líder que determine sobre las posibles alianzas, coalisiones o candidaturas en común.

Previo a este anuncio se supo que el Gobernador sostuvo pláticas desde hace dos semanas con el presidente nacional del PAN, Marko Cortés, y con el líder del PRI, Alejandro Moreno, donde dialogaron y analizaron la conveniencia de ir juntos en esta elección local, incluso se supo que el borrador en donde se plasmaran los acuerdos lo están elaborando en las oficinas centrales del PRI; no se descarta que vayan también el PRD y Nueva Alianza.

Y es que esta estrategia no se trata de que los priistas renuncien a su militancia política para luego encabezar las futuras candidaturas del PAN o vistiéndose de azul, más bien, están trabajando en primer lugar para que el alcalde de Mérida, Renan Barrera, vaya por una candidatura en común en donde esté arropado por el PAN, PRI, PRD y Nueva Alianza, es decir, no se prioriza las renuncias de los ciudadanos a su militancia, es un hecho que, tanto los tricolores como los albiazules, tendrán que postular a sus mejores activ@s políticos en los municipios donde los militantes de los diferentes partidos estén representados, lo que significa postular a quien pueda sumar votos y tenga realizado un trabajo territorial.

En Yucatán, el PRI y el PAN han sido dos partidos que han mantenido su nomenclatura gobernando al Estado, han aprendido de sus errores y de sus aciertos, y hoy demuestran que en Yucatán no hay cabida para improvisación y oportunismo, que actualmente se vive en Morena, en donde el arribo del senador del Verde Ecologista, Jorge Carlos Ramírez Marín, y del ex diputado del PAN, Rommel Pacheco, llegan como especies invasoras a un nuevo ecosistema desplazando a los cuadros morenistas, para luego colonizar a Morena.

Actualmente se puede vislumbrar en Morena a un partido en donde las nuevas adquisiciones llegan junto con sus añejos conflictos y agravios, sólo que el ring es el partido guinda. Para nadie es un secreto que la alianza que tienen los senadores guindas, Verónica Camino y Raúl Paz, es agenciarse la candidatura al Gobierno de Yucatán, pero también trabajan para volver a impedir que el ex delegado de Bienestar, Joaquín Díaz, se quede con la candidatura al Gobierno del Estado.