Coral Díaz/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- Todos los días un pequeño grupo de personas revisa cientos de datos que se generan e intercambian en el ciberespacio las dependencias de salud y otras áreas de gobierno, a fin de identificar posibles brotes de enfermedades de temporada o atípicas, por lo que de ellos dependen las políticas a aplicar para controlar los problemas.

Este trabajo se realiza en la Unidad de Información Epidemiológica (UIE) de la Secretaría de Salud del Estado (SSE), cuya relevancia es tal que en las instituciones de salud “puede estar vacante por determinado tiempo un puesto de jefe, pero no puede faltar el epidemiólogo”.

Este grupo profesional se encarga, con el equipo de apoyo, de revisar y notificar las emergencias, desde las tareas de prevención en caso de fenómenos naturales.

También son pieza clave en las labores de control de la contingencia después de la situación crítica y de la vigilancia en momentos de pandemias que ponen en riesgo a la población, como fue el caso de la influenza A/H1N1 en 2009, o actualmente ante la presencia del virus del ébola (en otros países).

Por lo general su trabajo se conoce en momentos críticos, pero lo realizan todo el año al revisar y analizar cada dato de las patologías, ya que un caso podría convertirse en un problema si no es atendido de forma correcta.

La subdirectora de Salud Pública de la SSE, Mirza Tec Kumul, explicó que el sistema de vigilancia epidemiológica está conformado por todas las unidades de salud del país, tanto públicas como privadas.

Entre ellas mencionó a las secretarías de Salud (SSA) y de la Defensa Nacional (Sedena), así como a los institutos Mexicano del Seguro Social (IMSS) y de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (Issste), entre otros.

“Gracias al sistema de vigilancia epidemiológica apegado al sistema nacional se han detectado muchas situaciones y se han externado, como cuando ocurrieron los brotes de dengue y la pandemia de la influenza, y actualmente con hepatitis”, apuntó.

La funcionaria estatal señaló que a veces el Estado figura en primeros lugares de diversas enfermedades, pero no se debe a que en otros estados no se realicen estadísticas, sino que el Estado es muy sensible, y además todo el sector colabora notificando los casos.

“Lo más importante es que el médico en Yucatán ya sabe que debe notificar aunque sólo sea probable, eso hace que quizá se tengan muchos casos para definir, pero lo relevante es que lo informen”, señaló.

Por ejemplo, detalló, en el caso del dengue, al tener un caso sospechoso, el sistema de vigilancia activa el programa, y como es en línea, el departamento de vectores ve el sistema, sabe dónde están los infectados y envía sus brigadas, “a veces cuando tenemos el resultado, la casa donde se presentó el posible caso ya se trabajó”.

“Eso permite evitar riesgos en la población, y no esperar un resultado y que se realice de forma posterior la acción, ya que realmente la vigilancia no es sólo para ver cuántos casos hay, también permite evaluar el impacto del programa y referir cuando hay éxito”, destacó.

En ese sentido, Tec Kumul comentó que en Yucatán el combate al dengue ha sido ejemplo internacional, ya que autoridades de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) han llegado para conocer el funcionamiento del sistema de vigilancia.

“Aunque el sistema sigue, en los lineamientos oficiales a nivel nacional tenemos buena cobertura y oportunidad de notificación, así como en la mayoría de los sistemas”, mencionó.

Señaló que se tiene una cobertura completa de epidemiólogos en las instituciones de salud del Estado, donde haría falta esta figura es en las acciones de campo para trabajar en las brigadas.

Los tipos de informes

En el informe semanal de vigilancia epidemiológica sólo se reporta si el caso correspondió a un hombre o mujer, la edad, la unidad de atención y edad, ya que se trata de enfermedades como las infecciones respiratorias o gastronómicas, por lo que sería imposible tener un sistema nominal con más detalles, refieren las autoridades.

En los sistemas especiales de vigilancia epidemiológica, para estudiar enfermedades con mayor detalle, por ejemplo el dengue, se tiene incluso un mapa con georreferenciada de la vivienda del caso, lo que permite efectuar acciones.

Asimismo, se cuenta con un sistema especial de influenza, tuberculosis, cólera, muertes maternas y VIH.

En todos estos casos se tiene el nombre, la edad, dónde viven, el resultado de su prueba, incluso cuántos son sus laboratorios, si tuvo plaquetopenia. En dengue, incluso, se puede ver si se volvió a enfermar, debido a que son varios serotipos.

Los boletines que se generan de esos sistemas especiales, por lo general, están más acordes a la realidad.

Todo en línea

• Todos los sistemas especiales están en línea, por lo que se tiene la oportunidad de ver el reporte casi en el momento que el médico lo sube.
• Los médicos de todas las instituciones de salud en el Estado tienen su clave y pueden acceder a la plataforma para reportar el caso.
• El resultado lo sube el laboratorio a la plataforma, ya que tienen clave para completar el diagnóstico del caso.

Integran una conexión vital

La dirección general de epidemiología  (DGE) encabeza el Sistema nacional de vigilancia epidemiológica (Sinave) de la SSA. Dirige la vigilancia epidemiológica y fortalece la red de colaboradores nacional e internacional para proveer de información y conocimientos de calidad que sustenten las políticas públicas en beneficio de la salud de la población. Otras instancias son:

Sinave

• El Sinave es el conjunto de estrategias y acciones epidemiológicas que permiten la producción de información útil para la salud pública.
• El Sistema integra información proveniente de todo el país y de todas las instituciones del Sistema Nacional de Salud (SNA).
• La información generada por el Sinave fluye desde 20 mil 5 unidades de atención de la salud hacia la Dirección General de Epidemiología (DGE), órgano normativo federal.
• Los responsables de vigilancia epidemiológica a nivel jurisdicción, estatal y federal verifican la información siguiendo lineamientos generales que son acordados por todas las instituciones del sector en órgano colegiados coordinadores y normativos de estos tres niveles administrativos.

Ceve

• En el nivel estatal funcionan los Centros de Vigilancia Epidemiológica (CEVE), en el caso de Yucatán la Unidad de Información Epidemiológica (UIE).
• En los Comités Jurisdiccionales para la Vigilancia Epidemiológica (Cojuves) participan representantes institucionales en cada jurisdicción.

Suive

• La información de vigilancia epidemiológica en México se integra en el Sistema Único de Información para la Vigilancia Epidemiológica (Suive). 
• El Suive no es un sistema completo de estadística de salud ni incluye toda la información sobre la situación epidemiológica nacional. 
• Actualmente, este sistema se enfoca a 114 enfermedades consideradas como las más relevantes del estado de salud de la población. 
• La información contenida en el Suive incluye la notificación de daños a la salud y resultados de pruebas de tamizaje y diagnóstico por laboratorio.

La hepatitis A activa vigilancia epidemiológica 

Ante el brote de hepatitis A que se presentó a principios de año en Yucatán, el cual se detectó a través del sistema de vigilancia epidemiológica, en el Estado dicha patología pasó de ser una enfermedad de notificación semanal a una inmediata, a fin de controlar este padecimiento.

El secretario estatal de Salud, Jorge Mendoza Mezquita, indicó que las decisiones se toman al detectar el impacto que tiene la enfermedad, en este caso, hasta septiembre en 27 municipios se mantenía activo el brote, por lo que se considera como problema de salud pública.

De esta manera, la Secretaría de Salud del Estado (SSE), que encabeza el Comité Estatal de Vigilancia Epidemiológica, giró instrucciones al IMSS y al Issste, así como a los sectores municipales que acerca de la medida.

El objetivo es que de manera pronta se actúe realizando el cerco epidemiológico en cada caso que se registre y no se disemine la enfermedad entre los habitantes, ya que de no tener las medidas de higiene adecuadas se propaga de forma fácil.
El funcionario señaló que al ubicar dónde se encuentran los casos se han implementado estrategias puntuales, como la aplicación de vacunas a los sectores más afectados para su disminución.

Cabe señalar que se ha registrado un promedio de 30 casos semanales de la enfermedad (se notifican todos los probables), por lo que Yucatán se ubica en el primer sitio a nivel nacional.

El funcionario estatal recordó que el contagio de la enfermedad revela problemas de higiene, como la cloración inadecuada del agua, ingerir alimentos en el calle y malos hábitos al alimentarse; por esta situación compete actuar a los ayuntamientos, la Secretaría de Educación Estatal (SEE), la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Yucatán (Japay) para hacer un frente común para que disminuyan los casos.

“Si bien es una enfermedad benigna, tenemos que tratar de disminuirla lo más posible; no hablamos de que se pueda erradicar, puesto que no hay una vacuna que lo logre, como pasó con la poliomielitis”, refirió. 

Bajo inspección

• Como parte de la estrategia se monitorea de manera puntual el agua entubada en los municipios de la entidad.
• De tal manera que si infringen la normatividad en torno a la cloración procederán con forme marcan las normas y las leyes en la materia.

Recopilan datos para los casos especiales

A través de la recopilación de la información de las enfermedades que se presentan en la entidad se pueden generar las acciones pertinentes para evitar un riesgo a la salud de la población del Estado, indicó el responsable de la Unidad de Información Epidemiológica (UIE) de la Secretaría de Salud del Estado (SSE), Santiago Pérez Domínguez.

Cabe señalar que la revisión que realizan en este centro se basa en una Norma Oficial, con lo que se determina cuáles son las enfermedades sujetas a vigilancia epidemiológica, las cuales algunas son de notificación inmediata y se manejan a través de un sistema especial y otras son de notificación semanal.

El responsable de la UIE hace su informe semanal, registra todos los casos de primera vez que son de notificación semanal y esto genera los boletines semanales que da a conocer la Secretaría de Salud federal (SSA).

En el caso de las enfermedades de notificación inmediata, deben ser informadas en menos de 24 horas, como es el caso del cólera, dengue hemorrágico, influenza y muertes maternas.

Cabe señalar que la notificación puede variar de acuerdo con la situación del Estado, ya que puede haber algunas que no sean de forma inmediata, pero debido a un brote o situación de gravedad, la instancia en el Estado puede determinar que sea así, como es el caso actual de la hepatitis A.

Pérez Domínguez destacó que lo anterior permite detectar de forma oportuna ciertos riesgos, ya que con el reporte semanal se elabora un canal endémico, que se realiza con al menos cinco años de antecedente y de esta forma se puede medir cómo se debe comportar la enfermedad en zonas de éxito o de alerta.