Bicicletas, celulares y hasta 'hechizos' tiran en cenotes

Autoridades afirman que en la entidad no existe una cultura sobre el cuidado de estas formaciones subterráneas.

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Los cenotes registran problemas de contaminación en diferentes índices, no sólo por la basura que el viento o la lluvia arrastran hasta estos sitios, sino por las sustancias que se vierten en la tierra y se filtran hasta ellos. (Benjamín Magaña y Milenio Novedades)
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Ana Hernández/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yucatán.- Autopartes, bicicletas, celulares, pañales, envases de plástico, medidores de luz, refrigeradores y hasta “hechizos”, forman parte de la basura que se extrae de los cenotes en la entidad, además de algunas especies de peces invasoras.

En este sentido, autoridades coordinaron este jueves la limpieza del cenote Xlacah, que se ubica en la zona arqueológica de Dzibilchaltún, como parte de los trabajos de remoción de la vegetación acuática que no sólo ha invadido buena parte de la superficie, sino que casi abarca todo el fondo del lugar.

El delegado de la Semarnat en Yucatán, Jorge Carlos Berlín Montero, indicó que entre la basura más común que han extraído están botellas de PET, de cristal, latas de cerveza, llantas, tambores de 200 litros, “entuertos o hechizos”, medidores de luz, comida, pañales y refrigeradores, lo que es muestra de un aspecto cultural: “aún no logramos que la gente deje limpias las áreas que utiliza”.

Por su parte, el secretario de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma), Eduardo Batllori Sampedro, dijo que los cenotes son una muestra del manto freático de más de dos mil 700 cuerpos de agua de este tipo que tienen registrados. Los que muestran mayor nivel de contaminación son los 50 que son más utilizados turísticamente, algunos tienen infraestructura y otros no.

Explico que estos 50 cuerpos de agua que tienen uso turístico o recreativo para las localidades, son lo que más se limpian y donde más se recuperan desechos; físicamente no están dañados por el vandalismo y no presentan rupturas, “pero si no hay baños las personas hacen sus necesidades en el cenote”.

Sobre los “hechizos” arrojados a los cenotes, consideró que es una práctica recurrente debido a que en muchas zonas se tiene la creencia de que para “atrapar novio”, deben bailar alrededor de estos lugares, hacer un conjuro y arrojar el “entuerto”, la caja o botella al agua.

Berlín Montero, quien también bucea para apoyar las labores de limpieza, señaló que buscan generar conciencia para reducir la contaminación de los cuerpos de agua y sus alrededores. En los trabajos de limpieza reciben el apoyo de buzos de Ecologistas Subacuáticos del Estado de Yucatán. 

  • Los cenotes son ideales para el espeleobuceo; se calcula que  en la entidad hay más de cinco mil.
  • El biólogo Rodrigo Ojeda Rodríguez, de Ecologistas Subacuáticos del Estado de Yucatán, dijo que en las tareas de limpieza han sacado hasta conos de tránsito. 

En el caso del cenote de Dzibilchaltún se programó el saneamiento por la sobrepoblación de lirios en la superficie y el fondo del cenote, es decir, a ocho metros de profundidad, porque el exceso, obstaculiza los flujos hidrológicos, cambia el ecosistema, la calidad del agua y ahí hay una variedad de especies.

Los cuerpos de agua que están en la zona del anillo de cenotes y reciben más visita, son los sitios que presentan más contaminación porque las personas dejan su basura; en ellos se retiran entre 70 y 90 kilos de basura. Mediante la campaña de limpieza se han visitado 14 cuerpos de agua.

Difetentes tipos de contaminación 

  • Según su ubicación, los cenotes registran problemas de contaminación en diferentes índices, no sólo por la basura que el viento o la lluvia arrastran hasta estos sitios, sino por las sustancias que se vierten en la tierra y se filtran hasta ellos.
  • Las personas aún no comprenden la importancia de conservación de los cenotes, que son únicos en la Península de Yucatán. Cuando se organiza su limpieza, se hacen acuerdos con ayuntamientos para que sigan con el saneamiento sobre todo en el exterior, porque la lluvia o el viento arrastran los desechos hasta estos sitios que por lo general están en desnivel.
  • En algunos municipios, donde el acceso al cenote quedó en una zona baja por el proceso de construcción de las calles o casas, las autoridades han construido un muro con pequeños ductos alrededor del sitio para evitar que la basura ingrese y sólo fluya el agua.
  • La palabra cenote deriva de la palabra ts’onot, nombre con que los indígenas llamaban a una especie de pozos grande y profundo, ya que su significado literal es hoyo o agujero en el suelo.

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