MÉRIDA, Yucatán.- Problemas y fallas con la conexión a internet, la señal de la televisión de paga y en ocasiones hasta la suspensión de la energía eléctrica por los fuertes vientos y las lluvias, son algunos de los inconvenientes a los que se enfrentan cientos de familias que viven en las comunidades rurales para que sus hijos puedan ponerse al corriente en los proyectos y actividades del programa “Aprende desde casa”, en medio de la contingencia sanitaria por el Covid-19.

De manera diferente a lo que suelen vivir las familias de la ciudad, donde la conexión con datos y señal de TV es relativamente aceptable, en las comunidades y comisarías del interior del Estado la situación es más difícil, por lo que los papás tienen que buscar alternativas para que sus hijos no pierdan las clases.

Algunos padres de familia, en el caso de los alumnos de nivel básico, incluso han creado grupos de WhatsApp o Facebook para mantenerse en contacto con los profesores en esta contingencia y avisarlos cuándo alguno no puede tomar las clases ante las inclemencias del tiempo o suspensiones del servicio de energía eléctrica.

Sin embargo, el contacto con todos es un poco bajo, si se considera que no todas las familias cuentan con los recursos económicos para pagar un servicio de Wi-fi al mes o cubren de manera periódica el saldo de sus teléfonos celulares, al no considerarlo como un servicio indispensable.