Novedades Yucatán/MÉRIDA

Con el objetivo de promover el consumo del café de una manera sustentable y prepararlo de una forma ecológica, con filtros de tela lavables, sin utilizar plásticos, ni energía eléctrica, adaptando los recursos de la región como la jícara, el barro, la madera, un grupo de artesanos fabrica las cafeteras artesanales Canixa.

Suliana Canul Xix, miembro del colectivo, aseguró que el valor agregado de estas cafeteras artesanales y que las distingue de las industrializadas, es que por un lado cuentan con un valor social, ya que el emprendimiento les da la oportunidad de empleo a muchas familias en especial del Carrillo Puerto, del estado de Quintana Roo, quienes ya no tienen que emigrar por cuestiones de trabajo.

“Al adquirir una cafetera se contribuye a la economía de la región porque son productos 100 por ciento artesanales, elaborados con recursos naturales que los habitantes de la región recolectan, utilizan pedazos de madera de troncos viejos, por lo que no hay necesidad de talar árboles y se continúa con el proceso sustentable”, indicó la ingeniera en gestión empresarial, con experiencia en procesos de comercialización y en enfoque comunitario.

Canul Xix dijo que están hechas de madera de la región, por artesanas mayas. El aparato denominado “Chuulub café” consiste en una base para la taza de café y en la parte de arriba tiene un filtro, hecho de tela y es reciclable, donde se coloca el café molido y se le agrega agua caliente.

“Además, contamos con tazas de barro (llamadas ts’aam café) que tienen una cuchara de madera con un filtro, donde se coloca el café soluble, que al tener contacto con el agua del recipiente prepara la bebida”, añadió.

El proyecto nació hace dos años y no solo beneficia la economía de la península de Yucatán, ya que el café que manejan los productores es traído desde Tabasco, 100 por ciento artesanal al igual que las cafeteras, y se ofrece en presentación molido o en grano.

(Foto: Novedades Yucatán)

Precios accesibles 

Los precios de las cafeteras van de 175 a 500 pesos (precio local de Quintana Roo, a esto hay que sumarle el gasto de envío a otro destino). El café “Maya Vinic” viene en dos presentaciones: de cuarto kilo (70 pesos) y de medio kilo (125 pesos).

“Seguimos sumando esfuerzos para esta noble labor, gracias a quienes se llevan a sus hogares o centros de trabajo una de nuestras Cafeteras Artesanales Canixa, su contribución fortalece la actividad productiva y artesanal de las familias rurales que integran el colectivo "Canixa", expresó.

Si están interesados en alguna cafetera pueden contactarlos a través de su página de Facebook: “Canixa, cafeteras artesanales” o al celular 983 1805680.
Hay cuatro modelos de cafeteras:

“Luuch café”: Trae dos jícaras, una arriba y otra abajo. Es una variedad de jícara que casi no se encuentra, de tamaño pequeño y silvestre. Se intenta rescatarla para darle el valor que tenía y recuperarla para este consumo.

La parte de arriba de la jícara tiene un agujero y sirve de filtro. Lleva una bolsa de tela manta, también reutilizable. Se coloca el agua y filtra el café a la jícara de abajo.

Moloo’ch café: Es una cafetera similar a la anterior pero más grande, ya que la jícara de abajo tiene capacidad para cuatro o cinco tazas de café.

“Chuulub café”: Surgió como una idea adaptada de una cafetera artesanal que conocieron de Costa Rica. Fue adaptada con madera local y pasta de barro. El nombre maya significa “Chorro de agua” y se refiere al chorro que cae de los techos de guano de las casas mayas, color café y con propiedades medicinales. Lleva una bolsita de tela reutilizable por donde chorrea el café.

Ts’ aam café: Es una cafetera individual que trae un infusor de café. En el borde de la taza lleva un animalito que en su cola tiene una bolista (también de manta lavable) que sirve de filtro, con capacidad para una o dos cucharadas de café. Hay cinco figuritas de animales: búho, cocodrilo, tucán, manatí y tapir.