Jorge Moreno/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- Hace unos días estuve en la comisaría de Pisté y unas personas que estaban allí de vacaciones me platicaron sobre un sonado caso que ocurrió en la isla de Cozumel; se trata de una Virgen que “lloró” debido a un incendio que hubo en la iglesia.

Ellos me dijeron que son de Mérida, pero habían acudido a pasar una temporada con unos parientes en esa isla quintanarroense cuando se enteraron del suceso, y vaya casualidad, porque resulta que ese caso yo ya lo había investigado en el año 2009.

En aquel entonces acudí a la “Isla de las Golondrinas” a impartir una conferencia en el parque de la colonia San Gervasio; en realidad, fue la transmisión en vivo del programa de televisión “Phenomenum” y ahí presenté en la pantalla gigante algunas de mis investigaciones.

Al final del evento, me presentaron un caso que ocurrió en esa colonia y que en su momento causó impacto; se trató de algo que ocurrió en el año 2007 y tuvo como testigo principal al señor Pedro Chan, quien descubrió que una imagen de la Virgen había llorado dentro de una iglesia, después de que esta última se incendiara debido a un accidente.

El fenómeno ocurrió en la iglesia “La Divina Providencia” que está ubicada en la colonia San Gervasio, el 27 de diciembre del año 2007, cuando ocurrió un incendio a las 2 de la madrugada. 

Debido a que la iglesia estaba decorada con motivo de las fiestas decembrinas y se utilizó mucho papel, las series de luces decorativas provocaron que un cortocircuito iniciara el fuego, en primera instancia quemando al papel, para que minutos después afectara el altar.

Al día siguiente por la mañana los encargados de la iglesia solicitaron apoyo de todos los vecinos para realizar una limpieza profunda de la iglesia por el motivo del incendio. Acudieron decenas de personas, entre los cuales se encontraba el señor Pedro y su familia.

Narra que al momento de sacar las imágenes para limpiarlas, la esposa de Chan le tomó una fotografía a la Virgen con su teléfono celular y al principio no le dio mucha importancia pero luego de unos momentos uno de los vecinos notó junto con la madre que la imagen sagrada tenía unas marcas de lágrimas en el rostro. En ese momento todos se acercaron para observar ese detalle y así pudieron constatar que también se notaban con claridad en la foto.

¿Agua de bomberos?

Cabe mencionar que al principio se pensó que esas marcas fueron del agua que tiraron bomberos pero de ser así, todo el rostro de la virgen se hubiera lavado. 

Don Pedro dijo que “puedo asegurar que en mi presencia fue corroborado este dato y dejó como única explicación de que fue un hecho trágico, ya que esta iglesia fue construida con mucho esfuerzo y digamos que fue triste para ella”. 

No cabe duda que este suceso causó mucho impacto, tanto entre los católicos como entre las personas no creyentes, pero a final de cuentas queda a criterio de cada quien darse su opinión.