Jorge Moreno/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Hoy les presentamos el relato que nos platicó don Roger Lara, un veterano policía de la ciudad de Mérida, quien por más de 25 años laboró en la entonces DPV (Departamento de Protección y Vialidad)  hoy Secretaría de Seguridad Pública (SSP).

Tuve la oportunidad de entrevistarlo hace 15 días durante la Gira Paranormal realizada en la villa de Maxcanú, a donde acudió en compañía de su hijo y sus nietos:

“Lo que te voy a platicar ocurrió a finales de los años ochentas cuando yo laboraba en Mérida; recuerdo muy bien que fue en octubre de 1989 porque ese mes y año celebré mis bodas de plata; estaba dirigiendo el tránsito en el crucero donde ahora hay un café muy famoso de 24 horas (calle 62 por 59).

“Eran como las cinco de la tarde, aún estaba claro; de pronto, a mis espaldas sólo escuché el rechinido de un auto que frenó quemando llanta; de inmediato volteé a ver y me aproximé. Miré a mi alrededor y no había ningún peatón cerca o algún perro que hubiera sido el motivo de la frenada intempestiva.

“Cuando me acerqué vi que era un señor como de 40 años, no tenía aliento alcohólico y se veía visiblemente nervioso; de hecho, se estacionó a un costado y lo primero que me dijo fue: ‘¿Dónde está? ¿está bien?’

“No le entendí y le pregunté a quién se refería, por lo que me contestó que ‘la niña’, pero le dije que no había ninguna niña; por lo que en ese momento me dijo que frenó de golpe porque vio que de pronto cruzaba la calle (venía sobre la 62, casi llegando a la 59) una pequeña.

“Tras insistirle que no había nadie, y tras verificar sus papeles –los cuales estaban en regla-, dejé que se fuera, por fortuna no venía ningún coche detrás de él porque si no de seguro le daba un golpe en su defensa trasera.

Muerte instantánea

“No le di importancia a este suceso, pero dos meses después en una junta que tuvimos en la corporación, dos compañeros mencionaron que en ese mismo crucero les habían reportado ver una niña cruzar intempestivamente la calle, por lo que los automovilistas tenían que frenar.

“De hecho, en uno de los casos no tuvo suerte el conductor, ya que al frenar sí le golpearon su auto.

“En ambos casos coincidían con ver a una niña de unos seis años, con un batón blanco cruzar la calle sola, por eso frenaban, lo mismo que le pasó al conductor que yo atendí.

“Un comandante señaló que varios años atrás justo en ese tramo atropellaron a una niña que estaba caminando con su mamá, pero que de pronto se le soltó de la mano, debido a que se le fue hacia el arrollo vehicular un globo que estaba jugando; por desgracia pasaba un carro y la atropellaron matándola (sic) casi de forma instantánea por el golpe.

“Realmente, yo nunca había sido de creer en fantasmas, pero pues dudo muchos que esos tres conductores hubiesen mentido si ni siquiera se conocían entre sí, y además la descripción de la menor era la misma en los tres casos.

“Con el paso de los años me retiré de la Policía y ya no supe si continuaron las manifestaciones, sería bueno que se investigue”, comentó.

“En lo que sí creo es en lo que pasa en el monte, ya que cuando yo era un muchacho mi papá y mis tíos me llevaban de cacería y ocurrían cosas sorprendentes, pues nos tocó ver aluxes, un huaypeek y una esfera de luz del tamaño de una pelota de tenis que se movía en el aire, pero ahí queda lo que me dijeron esas personas de los fantasmas del Centro de Mérida”, agregó.

Y para finalizar, agradeció SIPSE el que hayan espacios para la difusión de leyendas, fenómenos paranormales y el tema ovni: “Mi sección favorita de Enigmas es las ‘Leyendas mayas’ y claro está la de ‘Policías y fantasmas’, ya que esa fue mi profesión muchos años, pero a mis nietos les gusta mucho también lo que sale en los demás días. Qué bueno que se preocupen por difundir estos temas”, finalizó don Roger, a quien le agradecemos sus palabras.