Jorge Moreno/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Hoy hablaremos del panteón de Tekax, el cual fue construido en las faldas de un cerro, y llama la atención por varios casos paranormales que según cuentan ocurrieron en el interior de este sitio o sus alrededores.

Don Justino Solís, antiguo vecino de este municipio, me platicó que hace varias décadas ocurrió uno de los primeros casos sonados en cuanto a “fantasmas” y fue con relación a un frondoso árbol que se ubica hasta la fecha frente al cementerio (a un costado del terreno de la CFE), pues afirman que ahí se suicidó un joven y, por tal motivo, por un tiempo lo conocieron como “el árbol del ahorcado”.

“Esto no sólo a raíz del trágico suceso, sino también debido a que en los siguientes meses, acudían familias a ver a sus difuntos al cementerio y observaban horrorizados a una persona ahorcada en el árbol, y de pronto éste desaparecía.

“Una vez hasta llamaron a los paramédicos y la Policía, pues creyeron que alguien se había ahorcado, pero ya no había nadie ni ningún rastro.

“Muchos empezaron a creer que esto fue real, pues le pasó a personas que no estaban enteradas del suicidio de años atrás, incluso gente que venía de Oxkutzcab, Ticul o Mérida en época de fieles difuntos reportaba ver la aparición; si hubiesen sabido del suicidio pues podría ser sólo sugestión lo que vieron, pero si no estaban enterados pues no puede ser casualidad”, dijo.

Niños fantasmas

Otro caso más reciente (a mediados de los ochentas) fue cuando empezaron a reportar que en el interior del cementerio veían jugar a una pareja de niños de aproximadamente cuatro años de edad; esto lo atribuyen a un menor que falleció en un accidente lamentable, pues la madre lo descuidó un momento y el pequeño se metió a una piscina sin saber nadar; en tanto que el otro niño murió un par de días después, atropellado por un camión.

Las familias de estos pequeños no se conocían, pero las muertes ocurrieron en la misma semana y por eso se decía en el panteón que en el más allá los dos infantes se hicieron amigos y se hacían compañía en el cementerio.

Cabe mencionar que cerca del cementerio se ubica el edificio de la Cruz Roja Delegación Tekax, donde paramédicos y voluntarios, así como vecinos del rumbo, han reportado la presencia de espíritus y fantasmas; no se descarta que alguna de las apariciones infantiles sea precisamente de uno de estos dos pequeños.

Asfixiado con una huaya

Otro caso que se cuenta del panteón proviene precisamente de la Cruz Roja, ya que hace 14 años un alumno de una escuela que está a dos cuadras del cementerio jugaba en los pasillos mientras comía huayas, pero accidentalmente se tragó la pepita y comenzó a asfixiarse; lo trasladaron a ese nosocomio pero ya no pudieron hacer nada para salvarle la vida.

A partir de ese momento iniciaron los reportes con respecto a sus apariciones; primero decían que veían sombras atravesar los cuartos y pasillos, posteriormente unas huellas y por último los lamentos; por la descripción que han hecho permite suponer que es un niño.

Y no sólo ahí, también en la puerta del cementerio reportaron la presencia fantasmal de ese alumno, como si deambulara perdido, posiblemente esté buscando a los otros dos pequeños para jugar con ellos.

Guarida de hechiceros

Otros casos que me han platicado sobre el cementerio de Tekax, es que hace unos años era la “guarida” de algunos hechiceros, que se metían a este sitio para recopilar “tierra de panteón” y hacer conjuros, pero fueron “espantados” por la Policía para que ya no regresaran.

Próximamente regresaré a esta ciudad ubicada al sur del estado para hacer varias investigaciones que me han solicitado los mismos tekaxeños a través de sus correos a esta sección, estén pendientes.