Agencias
MÉRIDA, Yuc.- Un grupo de expertos del Centro de Investigaciones Regionales (CIR) Dr. Hideyo Noguchi de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady) trabajan para concretar, en un lapso de entre siete y diez años, una vacuna contra el mal de Chagas", afirmó Jorge Zavala Castro.

El titular del CIR agregó que para la elaboración de la vacuna "contamos con el apoyo de la Universidad de Tulane y de la Fundación Slim, quienes nos apoyan también en la construcción de una Unidad de Experimentación de Vacunas".

Largo proceso de validación

Zavala Castro explicó a Notimex que el proceso para validar una vacuna es largo -entre 10 y 15 años. El grupo de trabajo de la Uady ya pasó la primera etapa y ahora se dispone a la validación de los resultados que ha obtenido.

En una tercera etapa, instancias como la Secretaría de Salud y los Comités de Ética validarán los avances para después probar la inoculación en campo.

Respecto de la construcción de la Unidad de Experimentación, Jorge Zavala recordó que la obra comenzó en noviembre pasado y estimó que en tres o cuatro meses estará lista para su funcionamiento. "Este será un lugar específico para probar vacunas", precisó.

La enfermad de Chagas es un problema antiguo descrito en 1906 por el doctor Carlos Chagas, quien logró ubicar al parásito causante y al reservorio de transmisión. El reservorio es un insecto conocido como "pic": una chinche con alas amarrillas y negras que está en todos lados, apuntó.

"Es un problema que impacta en Brasil, Argentina, Uruguay y México donde se comenzó a estudiar en la década de los años 30 o 40 del siglo pasado y el problema se presenta en los estados de Oaxaca, Guerrero y Michoacán", detalló.

El funcionario aclaró que "la Enfermedad de Chagas no representa una mortalidad elevada pero sí morbilidad. Entre los años de 1998 y 1999 la Organización Mundial de la Salud (OMS) la clasificó entre las enfermedades con mayor potencial de pérdida de años productivos".

Reiteró que el problema principal es la incapacidad que se produce y el costo para la familia y para la sociedad. "No hay medicamentos inocuos y el que está disponible requiere de mucho cuidado para su administración además de las dificultades para conseguirlo.