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PROGRESO, Yucatán.- Poco después de las diez de la mañana, especialistas de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Autónoma de Yucatán se dieron cita en la playa, a la altura de la calle 30 y 32 de la colonia ejidal Benito Juárez, para practicar la necropsia al delfín que se encontró varado el sábado por la tarde y que ya presentaba signos de descomposición.

El cetáceo fue identificado como tonina o bufeo de la especie turpsiostruncatus, el especimen medía 2.34 metros de longitud de nariz a cola, y por el grado de descomposición fue fechado el fallecimiento un par de semanas atrás. 

Desde su llegada el personal de veterinaria de la Uady desenterró el cuerpo del delfín en compañía de personal de Ecología municipal y, tras varios minutos analizando los restos, consiguieron tomar muestras para los estudios, encontrando en el interior del estómago del animal restos de peces y hasta un pulpo. 

La causa de muerte según los estudios preliminares, pudo deberse al golpe de una embarcación o al ataque de algún depredador, por una dislocación a la altura la cadera. 

Tras los estudios el cuerpo fue enterrado nuevamente para evitar riesgos de salubridad entre los vecinos.