Deportan a yucateco de EU y le roban sus últimos dólares
Entre 30 y 44 yucatecos han sido repatriados hacia diferentes puntos de la república.
Katia Leyva/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- Los yucatecos repatriados de Estados Unidos, además de tener que pasar por las medidas migratorias adoptadas por el presidente Trump, sufren de abusos, robos, secuestros e infinidad de delitos una vez que llegan a “casa”, ya que los delicuentes piensan que traen consigo el dinero que ganaron durante su trabajo en el vecino país.
La mayoría de los inmigrantes llegan sin documentos de identidad, sin haber comido, sólo con la ropa que traen puesta y sin un solo peso. Una vez que son repatriados, tienen que buscar la forma de regresar a su lugar de origen.
El Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya del Estado de Yucatán (Indemaya) informó que en Estados Unidos se encuentran alrededor de 180 mil yucatecos, de los cuales 30 a 44 han sido repatriados hacia diferentes puntos de la república.
Durante las últimas horas se han presentado dos casos: el de Luis Javier y el de José Bartolomé, quienes trabajaron en Estados Unidos 20 y nueve años, respectivamente.
De acuerdo con el Indemaya, ellos se encargan de tramitarles una constancia de repatriación, que es válida como documento de identificación oficial mientras se tramita el acta de nacimiento o la credencial de elector.
En la mayoría de los casos se trata de personas que son el sostén de una familia y que además de ser “sacadas” de aquel lugar, tienen que sortear infinidad de retos en su regreso a casa, como la gente que en el camino se encarga de quitarles lo poco que pueden traer consigo.
Le quitan sus sueños y dólares
José Bartolomé Uh Pacheco, uno de los repatriados de Estados Unidos, explicó que la peor experiencia la tuvo en Veracruz, cuando unos policías lo bajaron a golpes del autobús donde se transportaba hacia la capital yucateca.
“Me acusaron de no ser mexicano por no traer conmigo mis papeles de migración y me golpearon, además me quitaron los mil 800 dólares que traía en la bolsa para el viaje, lo único que me quedaba”, indicó.
Pero por si esto fuera poco, llegan a enfrentarse con la amarga realidad de que el salario mínimo en México es de 80 pesos diarios, mientras que en lugares como San Diego, California, el sueldo es de 11.50 dólares por hora, “y la vida en México no es mucho más barata que en Estados Unidos”.
Para el Indemaya estas son "historias de tragedia, ya que al llegar caen de repente en la pobreza, dejan de poder mantener a sus familias, que en muchos casos no han visto en muchos años, es un shock para ambas partes".
Apoyo
- Ante la difícil situación el Gobierno del Estado asegura que les otorgará un apoyo para que puedan emprender un negocio y con ello estabilizar su situación.