En Yucatán, jóvenes prefieren lograr trabajo estable a ser padres
Cada vez hay más personas preparadas, por lo que ahora la juventud yucateca antepone sus estudios a desarrollarse socialmente
Patrizia Itzá/MÉRIDA
El panorama de vida de los yucatecos de entre 18 y 34 años es muy diferente al que tuvieron sus padres, quienes probablemente a esa edad ya se habían casado y formado una familia.
Ahora los jóvenes no ven esos temas como prioridad, sino que se enfocan más a la preparación profesional, debido a la alta competencia que genera la era digital, indicó Rocío Cortés Campos, profesora investigadora de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady).
Informó que a este sector de la población también se le denomina nativos digitales y migrantes digitales, debido a que muchos nacieron en la era donde las computadoras y los medios digitales son una prioridad; los segundos son quienes tuvieron que adaptarse a utilizar dichos aparatos.
Las prioridades entre las generaciones pasadas y las nuevas son diferentes, ya que si bien siempre se ha tenido en el mercado laboral competencias, cada vez hay más personas preparadas, por lo que ahora anteponen sus estudios a desarrollarse socialmente.
Explicó que cuando empezó el auge de las nuevas tecnologías se pensó en un abandono de actividades cara a cara, pero eso no fue así, sino que a través del servicio de mensajería instantánea se vio una extensión de las acciones que se realizaban a diario, como el trabajo.
La investigadora indicó que en el contexto actual, para vivir se tiene que tener un trabajo estable; sin embargo, muchas veces conseguirlo es difícil, y muchas personas de estas generaciones procuran la autogestión y la generación de competencias para desarrollarse en un escenario socioeconómico.
“Los nativos digitales, como se les puede llamar, más acorde a los millennials, es que no se quedan sólo con los estudios de las carreras que estudiaron, sino que aprenden otras cuestiones para desarrollarse en diversas áreas, situación a la que se ven obligados por la alta competencia laboral y académica”, consideró.
La tendencia es que los alumnos muchas veces no egresan únicamente con una preparación, sino a que al mismo tiempo aprenden otros oficios o técnicas, lo que da como resultado que las personas ya no tengan hijos o se casen, como generaciones anteriores.