Cada día nos acercamos más a lo que podríamos llamar el reinvento del siglo, ya que con otras características el tren fue parte del desarrollo del país hace un centenar de años, momento en el que las vías férreas se convirtieron en vasos comunicantes y con ello una serie de cambios sociales, políticos y económicos que detonaron la modernidad de México.

Momento histórico en el que los humanos dejaron de depender del transporte animal después de cinco mil años, siendo el caballo el animal que marcó, incluso, la diferencia social entre los que montaban y caminaban: los caballeros, cabalgaban.

La “yegua de acero” llamó Émile Zola al tren en su novela La bestia humana, donde se perpetra un asesinato durante un trayecto nocturno, algo similar a la novela de Agatha Christie, Muerte en el Expreso de Oriente, publicada cuatro décadas después.

No podemos olvidar El guardagujas, de Juan José Arreola, un oficio extinto por la industrialización a mediados del siglo XX. Existen una variedad de obras en diversos géneros literarios donde el tren es el medio de transporte que facilita la consumación de un hecho como en Ana Karenina, de León Tolstói, quien lo denominó “una deidad diabólica”.

Las estaciones eran nostálgicas; exacerbaban los sentimientos ya sea de bienvenida o de despedida. Si bien las personas ahora vivimos con los relojes, verdugos del tiempo, en la prehistoria se dabapor hecho el tiempo cíclico, por ello era importante la observación de la naturaleza.

Nietzsche en el Eterno retorno retoma la concepción del tiempo circular, pero no a un retorno tal cual, ya que sería desconocer los avances científicos y tecnológicos, sino conservando la base estructural para edificar algo que contribuya al engrandecimiento de la idea original. Entre 1920 y 1930 la irrupción del automóvil, el autobús y los aeroplanos contribuyeron a la decadencia del ferrocarril que ahora, 100 años después, se retorna en su esencia.

Está anunciado que el 15 de diciembre próximo, el Presidente inaugurará el primer tramo de siete que va de Cancún a Palenque y con esto se detone el turismo en Chiapas pues, según datos del Coneval, los índices de pobreza en el estado son considerables en cuanto a rezago educativo, servicios de salud, seguridad social, vivienda, alimentación y nutrición, lo que los convierte en una población altamente vulnerable.

Con lo anterior se espera que los turistas que vayan a Cancún inviertan nueve horas de su tiempo para trasladarse a través de 907 kilómetros a las ruinas de Palenque y aumenten su experiencia vacacional al combinar diversión con cultura.

Las aguas turquesas del Caribe Mexicano con el pasado prehispánico al visitar el Templo de las inscripciones, una pirámide escalonada donde se aprecia la escritura jeroglífica y sus relieves los cuales conservan los colores naturales.

Quizá entre la Historia y la Filosofía transitemos con mejor ánimo los inminentes cambios en el tiempo, reminiscencias de glorias pasadas.