Luis Fuente/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- Los dueños del perro mestizo y de los dos 'pitbull' macheteados en un predio del fraccionamiento Juan Pablo están en pláticas en la Fiscalía General del Estado para tratar de llegar a un acuerdo sobre la reparación del daño por la muerte de los tres animales.

Mientras tanto, la mañana de este miércoles unas 15 personas realizaron una protesta frente al Palacio Municipal para exigir que se legisle al respecto y que no queden impunes los “perricidios”.

De acuerdo con los manifestantes, encabezados por Leny Tamayo, la idea era hablar con el alcalde Mauricio Vila Dosal para que nombre a una persona como juez, que a su vez vigile y dar seguimiento a la ley de protección de animales

Además indicaron que el autor de los machetazos a la pareja de pitbull identificado como Mario Ávila, los amenaza y les dice que tiene influencias en la Fiscalía General del Estado y en la Secretaría de Seguridad Pública.

La Fiscalía General del Estado informó que hay dos denuncias relacionadas con este asunto, la primera presentada por los dueños de los perros que eran cruza de pitbull, y la otra por el dueño del perro mestizo que fue muerto por los dos primeros. Esto último motivó la intervención del propietario con un machete, quien también provocó la muerte de los animales agresores, ya que presuntamente también iban a atacar a su hija.

Los hechos

En la tarde del día 3 de noviembre, un vecino de una colonia del poniente de la ciudad mató a machetazos a dos perros que, por la falta de atención inmediata, se desangraron en plena calle.

Hay dos versiones: una señala que intervino para 'defender' del ataque de los canes a una niña que paseaba a su perro; y la otra señala que lo hizo para 'frenar' una 'agresiva' pelea entre los canes.

Aunque una unidad de la Fiscalía General del Estado (FGE) arribó al lugar donde ocurrió el incidente, nada pudo hacer para dar con el supuesto vecino agresor.

La versión de la dueña de los perros es que al llegar a su casa encontró a los perros mal heridos y en medio de charcos de sangre, y dos jóvenes que estaban cerca -y quienes supuestamente fueron testigos de los hechos- le comentaron que Mario A., vecino del lugar, había atacado a los animales.

Otra versión señala que, cerca de donde estaban ambos perros, pasó una niña que paseaba a un perro, y que ambos animales -cruza de pitbull- no solo atacaron al perro de la niña, sino también a la pequeña, por lo que la madre de ésta a gritos pidió auxilio. 

Fue entonces cuando el vecino intervino para defender a la niña; primero, dicen los testigos, sacó un tubo, pero esto no amendrentó a los animales, uno de los cuales incluso rompió el tubo. 

Esto 'obligó' al atacante a buscar un arma más efectiva y entonces regresó con un machete.