Jóvenes yucatecos innovan en el cuidado animal

Rashid Ariel Cortázar y David Pino crean un espacio de confort para perros. En Matt dog’s se ofrece adiestramiento y belleza para los animales.

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David Pino Rosado y Rashid Ariel Cortázar señalan que la clave de su éxito es el trato digno que le ofrecen a los animales. (Milenio Novedades)
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Cecilia Ricárdez/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- Aficionado por los perros desde temprana edad, Rashid Ariel Cortázar inició su carrera de entrenador canino a los 10 años y a pesar de su juventud no tuvo miedo de considerarlo una profesión, por lo que trabajó con importantes escuelas de adiestramiento.

Hace cinco años emprendió su propia institución, a la que se unió otro joven emprendedor, especialista en estilismo y con 14 años de experiencia, David Pino Rosado con el proyecto Matt dog’s.

Los dos crearon un centro de atención integral: salud, obediencia y belleza.

Rashid cumple en noviembre 20 años y además de ser el director y maestro principal de su organización, forma parte de eventos de promoción de tenencia responsable de mascotas y ofrece exhibiciones gratuitas en fundaciones que apoyan a sectores vulnerables.

Cabe mencionar que es uno de los colaboradores del programa De Do Pingüe conducido por Morita en Gala TV Mérida de Grupo SIPSE.

Por su parte, David, de 28 años, ya compitió con su especialidad en Nicaragua, El Salvador, Guatemala, Cuba y toda la República Mexicana. 

Ambos están certificados ante la Federación Canófila Mexicana y el joven estilista es reconocido por la Federación Cinológica Internacional.

¿Por qué iniciar un negocio de servicio a las mascotas?

Rashid: Desde que comencé en esto trabajé de manera particular y con escuelas; a los 14 años obtuve mi primer reconocimiento y siempre tuve claro que quería dedicarme al adiestramiento, por eso, de manera autodidacta me formé y tomo cursos que se proponen tanto en Mérida como en otros estados.  

Hace cinco años decidí que ya estaba listo para dar el siguiente paso y comencé el trabajo, primero en lugares públicos con cursos de obediencia y posteriormente en mi propio local, donde tenemos espacios para hospedar a los perros: un lugar para que entrenen; alimentación y atención todo el tiempo.

En el camino conocí a David, quien también joven y con muchos años de experiencia me propuso hacer negocio y acepté. De esta manera, en el mismo sitio, creamos un centro de atención integral, en la que él se especializa en la belleza del animal y yo en el entrenamiento. También tenemos un veterinario para el cuidado de la salud, el Dr. José Linaldi.

¿Con qué capital arrancaron?

Ambos teníamos dinero ahorrado de los trabajos que realizamos por separado y con pocos elementos empezamos; cuando comenzamos a tener clientes reinvertimos para mejorar las instalaciones y seguiremos con esa línea para ser líderes en el ramo. Estamos viviendo nuestro sueño haciendo lo que amamos.

¿Cuál consideras que es la ventaja competitiva de tu institución?

La dedicación y el trato digno que le damos a los animales, atención personalizada y constante comunicación con el cliente.

Logramos crear fidelidad con un servicio de calidad y el respaldo de mucha experiencia y preparación a pesar de que somos jóvenes. De igual manera estamos en constante capacitación para estar al día en las técnicas en nuestra área. Además en los cursos de obediencia laboramos con refuerzo positivo y no correctivo.

¿El factor joven cómo ha influido en su trabajo?

Antes de que nos uniéramos, no creían que unos casi niños realizaban tal nivel de trabajo. En mi caso, cuando llegaba a la casa de los clientes para ver a los perros pensaban que era una broma que un niño de 10 años fuera a educar a su mascota.

Con cierta descofianza me dejaron desempeñarme y cuando notaron los resultados de inmediato me gané su respeto. Además, como parte de ese proceso tomé a cursos con psicólogos para aprender a expresarme, entender y comunicarme mejor con los adultos.

¿Qué reconocimientos tienen hasta el momento?

Tenemos la fortuna de decir que tenemos tantos listones de primeros lugares en las diferentes categorías que no entraron en la pared.

Nos sentimos agradecidos con organizaciones como la Federación Canófila Mexicana, la Federación Cinológica Internacional y del UKC (El United Kennel Club o “Unión de Clubes Caninos”), el cual gestiona una de las mayores bases de datos sobre razas caninas en el mundo.

También tenemos reconocimiento de participación en eventos, competencias y exhibiciones especiales.

¿Cuáles son los siguientes pasos para su proyecto?

Crecer en espacio y profesionalmente. Queremos tener reconocimiento más allá de Yucatán, que se valore nuestra propuesta al nivel nacional y hasta mundial. De todos modos aquí atendemos ejemplares de residentes de otros países que dan fe de nuestra calidad respecto a la que hay en sus lugares de origen.

¿Qué consejos compartirían con sus contemporáneos?

Que no se den por vencidos; aunque les digan locos no pierdan el enfoque, trabajen, prepárense para ello. Ahorren, no se gasten sus ganancias, reinviertan dinero y tiempo, esto significa sacrificios en otras esferas de la vida como la social, pero no se arrepentirán, especialmente si hacen lo que aman. Que no los detenga la edad, ya que desde niños pueden emprender, aprender y dar resultados.

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