Luis Fuente/MÉRIDA
Un pequeño de 11 años que fue a hacer un mandado a una casa en Oxkutzcab, descubrió el cadáver del dueño, por lo que salió corriendo del inmueble para avisarle a un familiar del ahora occiso. 

Esto movilizó a la Policía Estatal de Investigación y a la Fiscalía General del Estado, pero al final no intervinieron debido a que se trató de una muerte patológica. 

Alrededor de las ocho de la mañana de este martes, el niño L.T.M. de 11 años de edad, acudió al domicilio de Santos C., de 50 años de edad, ubicado en la calle 42-A entre 67 y 69 de Oxkutzcab, pero al entrar a la vivienda halló tirado al propietario. 

Pensando que estaba dormido, el menor intentó despertar al hombre, pero como éste no reaccionaba, salió corriendo de la casa para ir a avisar a la hermana del sujeto sobre su descubrimiento. 

La familiar fue al lugar y tras comprobar los hechos avisó de lo sucedido al número de emergencias 911, de modo que en minutos llegó una ambulancia, pero los paramédicos sólo pudieron comprobar que Santos C. estaba muerto. 

Posteriormente, arribó personal del Ministerio Público y Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado, pero al final no intervinieron porque se trató de una muerte patológica y un doctor particular se encargaría de emitir el certificado de defunción. 

La mujer indicó a las autoridades ministeriales que su hermano padecía cirrosis y asma.