MÉRIDA, Yuc.- “La Semarnat está obligada por ley a revisar la manifestación de impacto ambiental del tren maya y a abrir una consulta pública en las comunidades indígenas por las que pasará dicho transporte”, aseveró el titular de dicha dependencia federal, Víctor Toledo Manzur.

Durante la conferencia virtual “La Secretaría de Medio Ambiente y los Trenes”, que ofreció esta tarde el director de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, explicó que se realizará una consulta entre las 167 comunidades que habitan en el trayecto que comprende la fase 1 del tren maya. 

Dicha fase abarca tres tramos de la obra, que van de Palenque, Chiapas a Izamal, Yucatán; con 13 estaciones, 146 pasos vehiculares, 24 viaductos y 40 pasos de fauna.

“Si por alguna razón esta consulta no se cumpliera, la sociedad puede levantar juicios de amparo para suspender las obras”, detalló el funcionario.

La consulta se hace en cumplimiento al convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), por lo que es independiente a las 15 consultas realizadas a finales del año pasado. 

“Para este tramo de Palenque-Izamal tenemos que realizar una consulta indígena específica porque ahí el tren va a atravesar 167 localidades mayas, por lo tanto estamos obligados, por las leyes, por la Constitución mexicana, a realizar una consulta en este tramo”, acotó. 

Estamos en preparación, continuó, va a llevar unas seis semanas y alrededor del 9 o 10 de septiembre la consulta indígena se habrá cumplido. 

En conferencia virtual, el funcionario sostuvo que no es posible hacer un proyecto de esta envergadura si no se toma en cuenta la presencia de las culturas mayas.

Ordenamientos ecológicos

Asimismo, destacó que llegó a un acuerdo con el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) para que se realicen ordenamientos ecológicos participativos en los 78 municipios que van a recorrer el tren maya. 

“Es un logro realizar ordenamientos ecológicos participativos en los 78 municipios que va a recorrer el Tren Maya, la única manera de que este proyecto no repita los errores que se cometieron con Cancún y Riviera Maya, donde se garantice que el tren maya no va a afectar el entorno natural sino cultural y social”, apuntó.

Por último, rechazó las críticas y reclamos de personas que no habitan en la Península, pues imaginan que van a ser afectadas comunidades mayas pasivas, desinformadas, atrasadas e inermes.

Con información de Milenio