|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

La revista Time sacó una edición especial dedicada a la ciencia de la felicidad. En esta revista observan la felicidad desde varios ángulos, pero se enfocan primordialmente en entender que en nuestra carrera por encontrar lo que creemos que nos trae felicidad, realmente estamos aniquilando nuestras oportunidades de llegar a ella.

Nos presiona la creencia actual de que para lograr el éxito y la felicidad tenemos que estar constantemente obteniendo logros o cosas, continuando la loca carrera hacia la siguiente meta y todo lo mas pronto posible.

No estamos nunca en el presente, siempre estamos pensando en la siguiente tarea, en el siguiente paso, en el próximo logro, y en este proceso sacrificamos al presente, el aquí y el ahora, y con ello hacemos a un lado la oportunidad de encontrar la serenidad, y con ella la felicidad, ya que aumentamos nuestro estrés y nuestros sentimientos negativos.

Todos esto lo hacemos porque tenemos la creencia de que vale la pena posponer la felicidad y satisfacción con el objetivo de encontrar algo mejor, pero ese algo mejor está en el futuro, y nadie puede controlar el futuro.

Si no gozamos lo logrado hoy, si no disfrutamos el momento, no podemos saber qué pasará, a dónde llegaremos o qué tendremos que enfrentar.

Hay que vivir el momento gozando de nuestros pequeños logros y dando pasos seguros. Este proceso de retrasar nuestra recompensa puede durar toda una vida y podemos vivir avanzando como el burro que camina tras la zanahoria sin darnos cuenta de que nunca lograremos alcanzarla.

Paradójicamente, si logramos bajar el ritmo y vivir el presente, enfocándonos en el momento actual, nos será posible disfrutar de nuestros logros y nuestros éxitos, o aprender de los pequeños tropiezos o problemas.

Si en lugar de correr tras enormes metas futuras, nos concentramos en lo que hoy tenemos que hacer, lograremos más productividad y mayor felicidad.

La creencia hoy es que debemos dividir nuestra atención en varios frentes; estamos en una junta, mientras hacemos la lista de pendientes, checamos nuestras redes sociales y contestamos mails atrasados.

Las 24 horas del día no son suficientes. Pero en realidad dividir nuestra atención en lugar de permitirnos lograr más cosas hace que no hagamos bien ninguna de las cosas que hacemos.

Está comprobado que cuanto más involucrado estás en las redes sociales y en estar consultando tu teléfono tu nivel de ansiedad y depresión aumenta. Por el contrario, cuando estás en sintonía con lo que estás haciendo es más posible que encuentres la serenidad y la satisfacción.

Y la pregunta es ¿Por qué sentimos mas serenidad y felicidad cuando estamos concentrados en le presente? Y es porque en verdad podemos experimentar y sentir todo lo que nos rodea, lo que es real y que está sucediendo en ese momento; en lugar de correr para lograr completar más actividades podemos concentrarnos y disfrutar lo que estamos haciendo y podemos comprometernos con cualquier proyecto que estemos haciendo.

No es fácil romper el hábito de toda una vida, de toda una sociedad, suena como una actividad agotadora, pero el primer paso es darnos cuenta de que debemos hacerlo, de que lo necesitamos.

Cuando sientas que tu mente está comenzando a irse a pensamientos del futuro, sobre los que no tenemos ningún control, podemos elegir no seguir con esa línea de pensamiento, interrumpirnos y volver al presente; respirar profundo y recordar que lo importante es el ahora.

Si estás comiendo con tu familia y llega un mensaje del trabajo que puede esperar, no contestes, concéntrarte en lo que sucede a tu alrededor y deja el teléfono a un lado.

Esto no es fácil al principio, pero es como ejercitar un músculo; si perseveramos lograremos fortalecer nuestra atención y nuestra serenidad.

Regálate una dieta de tecnología y establece horarios para consultas a tus redes sociales y a tus mensajes, pide la gente que te rodea que los respete y asigna un tiempo diario para disfrutar tu entorno, para ver el cielo, para tomar un café con una amiga, para jugar con tus hijos, para hacer introspección y conocerte a ti mismo, para disfrutar música.

Regálate momentos en que puedes estar completamente en el presente disfrutando la actividad que decidas realizar y respétalos.

Cuando logras estar al 100% en el trabajo que estás realizando o , disfrutando a la persona con la que te encuentras, entonces entiendes el sentido de la alegría, no importa qué es lo que estas haciendo, puedes verdaderamente disfrutarlo. Esta alegría te llevará a un mejor rendimiento y a tener mejores y más significativas relaciones.

Date tiempo para la meditación, para la respiración y para disfrutar el momento.

Lo más leído

skeleton





skeleton