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Dos filmes ocupan este espacio, el primero, indudablemente el estreno de la semana, por número de copias y toda la mercadotecnia que la rodea es “Venon”, del estadounidense Ruben Fleischer, y la coproducción México-Alemania, “La gran promesa”, dirigida por Jorge Ramírez Suárez.

De “Venon” las expectativas no son muy promisorias, pues la crítica especializada la ha tratado como la gran decepción del cine de comics, aunque a pesar de la carencia de un argumento convincente, de la falta de puntos climáticos que emocionen al espectador, puede ser uno de los grandes éxitos en taquilla.
La esperada recaudación de este filme –si se da- responderá principalmente a la atención que los medios han tenido, gracias a la generosa publicidad en la que se han invertido millones de dólares y que seguramente llevará a los fans y a muchos más espectadores a las salas. Los efectos especiales son otro aliciente que puede atraer al público que no le importe lo que se ha dicho del filme entre la comunidad cinéfila.

También llega a la cartelera en nuestro país “La gran promesa”, de Jorge Ramírez Suárez y que protagonizan Juan Manuel Bernal, Sofía Espinosa e Ilithya Manzanilla.
El filme nos narra la historia de Stella, hija del fotoperiodista Sergio de Alba, quien se encuentra en el extranjero cubriendo una guerra, mientras su mujer está dando a luz y posteriormente muriendo. La niña queda huérfana en Los Ángeles, California, y el padre decide ir por ella, aunque encuentra muchos problemas que legalmente le impiden llevarla consigo y decide raptarla.

Para escapar de la justicia, Sergio decide llevar a Stella con unos amigos a Durango, México, y dejarla ahí un tiempo hasta que las cosas se tranquilicen, periodo que se extiende 20 años. El reencuentro entre padre e hija se vuelve el gancho emotivo que sienta en el espectador una fuerte razón para considerar el filme como conmovedor y positivo.

Económicamente hablando, el filme resultó uno de los de mayor presupuesto del cine mexicano, al recibir casi 40 millones de pesos, capital que se ve reflejado en sus diversas locaciones, pues fue filmada en cuatro países: Alemania, Bosnia, Estados Unidos y México.

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