A 21 años de “Isidore”
Juan Vázquez Montalvo: A 21 años de “Isidore”.
Se cumplen 21 años de la llegada del huracán “Isidore” a Yucatán, el cual ha sido el peor para nosotros por los daños y las muertes que provocó, superando lo hecho por “Gilberto” 14 años atrás, siendo un fenómeno que nos sorprendió un domingo, ya que no se esperaba que nos afectara directamente. Los modelos de predicción nunca indicaron con tiempo que venía a Yucatán, pero era tan errático en su desplazamiento, y al final nos sorprendió.
A continuación haremos una narrativa de su desplazamiento. Fue el noveno ciclón de la temporada del año 2002, con nombre y el segundo huracán de la misma. Alcanzó la categoría 3 de la escala SaffirSimpson, con vientos sostenidos de 225km/h antes de ingresar a la costa yucateca por Telchac Puerto, durante la tarde del domingo 22 de septiembre. Antes fue la depresión tropical No. 10 de la temporada, formándose el 14 de septiembre en el Mar Caribe, llegando a tormenta cerca de la Isla de Jamaica, el día 18 de septiembre, y ya para el día 19 se convirtió en huracán categoría I, cuando se encontraba al suroeste de Cuba. Posteriormente, alcanzó la categoría II al encontraba al sur del occidente de Cuba, siempre en aguas del Mar Caribe. El 21 de septiembre, mientras cruzaba el canal de Yucatán, se convirtió en huracán intenso con categoría III.
La tarde y noche de ese sábado sorprendió a los meteorólogos, ya que dio un cambio en su ruta hacia el noroeste, lo que haría que pasara por aguas del este del Golfo de México, cambiando repentinamente hacia el oeste, lo que provocó que se dirigiera hacia la costa norte de la Península de Yucatán. Ya para el mediodía del domingo 22, una vaguada ubicada en el oeste del Golfo de México la obligó a girar hacia el suroeste, ingresando a tierra yucateca por las cercanías de Telchac Puerto en horas de la tarde, con intensidad 3, presentando vientos sostenidos de 205km/h, y con rachas que alcanzaban los 260 km/h, pero desplazándose muy lentamente.
Llegó a la parte este de la ciudad de Mérida, a eso de las 17:00 horas, cuando ya era categoría II, con vientos sostenidos de 175km/h, y rachas de hasta 219 km/h, medidas registradas por la esta estación FIUADY, ubicada al norte de Mérida. Al amanecer, llegó al sur del Estado, donde se estacionó, provocando lluvias intensas y vientos ya antes descritos. Durante la mañana del lunes 23 de septiembre se degrado a huracán I, posteriormente, al mediodía, se degrado a tormenta, y para las horas de la tarde al fin empezó a moverse rumbo al norte y noroeste, pasando en las primeras horas de la madrugada del día 24 por el oeste de Mérida, hasta las aguas del Golfo de México, y casi al amanecer, por un punto cercano al puerto de Chuburná y Sisal.
En total, estuvo 36 horas dentro del Estado, lo que equivalió a la afectación de 3 ciclones, destruyendo la zona con más infraestructura económica, agrícola, avícola, pecuaria y ganadera de Yucatán. Los daños que dejó superaron por mucho a los ocasionados por el huracán “Gilberto”, considerado años atrás como el huracán del siglo.
Hubo por parte de la población yucateca un exceso de confianza y eso, lógicamente, se pagó muy caro, ya que pasaron su huracán en las plazas comerciales, cines o casas de amigos y parientes. “Isidore” nos graduó a la fuerza en medidas contra huracanes, sobre todo en relación a lo que no se debe de hacer.