Mayas yucatecos, genética y diabetes mellitus
Miguel Güémez Pineda: Mayas yucatecos, genética y diabetes mellitus.
La diabetes mellitus (DM) es una enfermedad crónica de naturaleza multifactorial e involucra un complejo grupo de sistemas genéticos que interactúan dentro de una estructura social, también compleja, que determina tanto el comportamiento como la influencia del medio ambiente. Desde mediados del siglo XX se ha postulado que los grupos indígenas que habitan el continente americano tienen un gen ahorrador que los hace susceptibles a la diabetes, obesidad y dislipidemias al cambiar sus patrones de alimentación. Otros estudios han mostrado que grupos indígenas menos aculturados como los mazatecos, huicholes, tepehuanos y otomíes exhibieron prevalencias de diabetes menores al 5%, posiblemente a que conservan en cierto grado una alimentación tradicional protectora y una actividad física de moderada a intensa, debido a que realizan trabajos agrícolas en las montañas.
En las últimas décadas, la DM se ha incrementado en las poblaciones rurales e indígenas del territorio nacional con graves complicaciones y daños: enfermedades cerebro vasculares, cardiovasculares, nefropatías, retinopatías, neuropatías, amputaciones de extremidades inferiores, trastornos emocionales y muerte. Los grupos étnicos que exhiben elevadas prevalencias son los yaquis, los mixtecosy los mayas yucatecos.
Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut 2018), en la Península yucateca, Campeche es la entidad con el más alto porcentaje de diagnóstico previo de diabetes, en población de 20 años y más, con un 14% y en 2019 ocupó el primer lugar de mortalidad nacional asociadas a esta enfermedad; le sigue el estado de Yucatán con el 10.7% y Quintana Roo con un 7.8% (por debajo de la media nacional de 10.3%). Un dato alarmante es que la diabetes cada vez se observa más en personas jóvenes; además, existe una elevada prevalencia de niños con síndrome metabólico. El Sistema de Información de Enfermedades Crónicas (SIC) reporta que en Yucatán existen 7,465 personas que viven con diabetes: 5,705 (76.4%) son mujeres, y 1,760 (23.6%) son varones.
En la región peninsular, es la población rural e indígena la más vulnerable y registra tasas más altas de diabetes que las personas no indígenas de los sectores urbanos; además, enfrentan la enfermedad en condiciones de grandes desventajas, educativas, de comunicación, aislamiento geográfico, altos niveles de desempleo, pobreza estructural, alta marginación, falta de servicios adecuados de salud, e incomprensión del personal de salud de las nociones de saludenfermedad y nutrición, entre otros.
A pesar de los logros en materia de salud alcanzados en las últimas décadas y de los esfuerzos que realizan organizaciones nacionales e internacionales, la prevalencia de la diabetes sigue en aumento, lo cual evidencia la necesidad de diseñar e implementar estrategias inter y multidisciplinarias con una perspectiva intercultural y de género que permitan incidir en la suprevención, el control y/o el automanejo, dado que involucra un cambio de mentalidad, la modificación de hábitos alimenticios y de los usos y costumbres de las personas que viven con la enfermedad y sus familias. Asimismo, se requieren realizar investigaciones adicionales orientadas a aportar una mejor comprensión de la influencia de otros factores como la predisposición genética y los factores sociales y culturales que influyen en este padecimiento.