MÉRIDA.- Desde el inicio de la contingencia las autoridades han buscado medidas para que la gente permanezca en sus hogares y así evitar contagios, sin embargo, hay quienes sin razón alguna se niegan a seguirlas.

Es normal que todos los días, decenas de personas utilicen las bancas de la Plaza Grande para pasar un rato agradable o descansar un poco. Muchos se sientan por horas para platicar y aprovechar la sombra de los árboles.

Pero esto ya no es posible, pues ahora la Policía Municipal se encarga de retirar a todas estas personas que sin motivo alguno se sientan en las bancas de la plaza.

Los efectivos llegan y explican la situación, para posteriormente pedirles a los ciudadanos que se retiren.

Desde esta mañana, el Centro de la capital yucateca tuvo un nuevo escenario al ver negocios y plazas comerciales cerradas.

Sin embargo, en diferentes calles del Centro Histórico se pueden observar a algunos vendedores ambulantes, quienes a pesar de la medida salen a tratar de vender sus productos para poder obtener algún ingreso y mantener a su familia.