Ana Hernández/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Una guacamaya roja de la variedad ala verde está en calidad de huésped, desde el viernes pasado, en el Parque del Centenario, bajo resguardo de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).

El ave, que fue hallada en el Aeropuerto Internacional de Mérida, en un vuelo con destino a la Ciudad de México, carecía de la documentación que acreditara su procedencia legal, y se tenía duda sobre la posesión debido a que no había datos de referencia de aprovechamiento y origen.

Ante esa situación, las autoridades del aeropuerto reportaron la situación a la delegación de la Profepa en Yucatán, los cuales comprobaron las irregularidades en la documentación y procedieron a incautar temporalmente el ave.

Los inspectores de esta dependencia federal levantaron un acta de inspección y aseguraron el ejemplar, el cual fue trasladado a la Unidad de Fomento a la Conservación y aprovechamiento Sustentable de la Vida Silvestre (UMA) “Parque Zoológico El Centenario”. 

Se informó que la guacamaya saldrá de ahí en cuanto concluya el proceso.

De acuerdo con información proporcionada en la delegación, el ave no está en la categoría de especies protegidas, pero entra en el rubro de animales exóticos, y es responsabilidad de la dependencia federal verificar las condiciones de su manejo y traslado.

La Ley General de Vida Silvestre, establece que si una persona no tiene autorización de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para demostrar la legal procedencia o manejo de las aves, según la gravedad de la falta se pueden establecer sanciones de 50 a 50 mil veces el salario mínimo vigente.

La adquisición de un ejemplar de vida silvestre sin la documentación que acredite que provienen de aprovechamientos sustentables autorizados o que fueron legalmente importados, genera  tráfico ilegal de vida silvestre y a la consecuente afectación al ecosistema.