Joel González/Mérida

Un equipo de creativos muy calificados que desde hace meses trabaja de forma incesante para recrear la magia de la ópera, dan los últimos toques a la producción escenografía y vestuario de la obra Cavalleria Rusticana, de Pietro Mascagni, una de las obras más representadas, que ofrecerá una serie de funciones del 14 al 22 de junio en el Peón Contreras.

El grupo de trabajo está conformado por Ragnar Conde, en la dirección de escena; Oscar Altamirano, titular de la escenografía; Carlos Arce, responsable de la iluminación, y el experto en diseño de vestuario y maquillaje, Gabriel Ancira.

Pese a ser una obra compacta con duración aproximada de 75 minutos, esta joya del verismo, con profundo sentimiento religioso, lo tiene todo, celos, traición y música, todas las cualidades para motivar al publico a asistir a las funciones, señaló Juan Carlos Lomónaco, director titular de la Orquesta Sinfónica de Yucatán (OSY).

En tanto que Miguel Escobedo Novelo, director general del Figarosy, declaró que esta nueva aventura artística requirió una inversión de 3 millones de pesos, un presupuesto bajo si se compara con montajes similares. Sin embargo, la producción es ambiciosa tal y como lo han sido las anteriores presentadas durante 15 años de manera ininterrumpida.

Acompañado de Margarita Molina Zaldívar, presidenta del Patronato para la Orquesta Sinfónica de Yucatán, expresó que la puesta en escena ofrecerá cinco funciones y que nadie debe perdérsela, ya que rompe los mitos de la ópera de ofrecer montajes muy extensos.

Por su parte, Ragnar Conde, con experiencia de más de 80 proyectos escénicos, comentó que la demandante producción no solo es una ópera verista sino un tesoro, “la joya de la corona del género”, que refleja las costumbres de un pueblo del sur de Italia en el siglo XIX, este tiempo de contrastes y pasiones en que trascurre la obra refleja que la vida no ha cambiado mucho.

Los personajes luchan por el amor y por mantener su posición social, apuntó.

En el uso de la palabra, Oscar Altamirano indicó que la creación escenográfica es monumental, ya que es una recopilación de la arquitectura italiana partiendo del medievo, con muchos detalles, ambientes mediterráneos calurosos que enmarcan la vida cotidiana, mientras que Gabriel Ancira, informó que para la producción del vestuario fue necesario realizar una investigación de telas que se adaptaran a las características y condiciones del montaje, así como un estudio social sobre los tipos de diseño que se estilaba en esa época; ambos creativos son egresados de la Escuela Nacional de Artes teatral.