Luis Fuente/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- El compromiso de promover y difundir hasta en las comunidades más alejadas y marginadas de Yucatán el tema de la prevención de la violencia hacia las mujeres, fue el resultado de un encuentro privado entre los ombudsman nacional y local y profesionistas y empresarias, con quienes se acordó la creación de una red de promotoras y defensoras de los derechos de las mujeres.

En este evento, realizado en el hotel Victoria, el ombudsman nacional, Raúl Plascencia Villanueva, resaltó los trabajos que ha realizado la Fiscalía General del Estado con la creación del Centro de Justicia para Mujeres, la Unidad de Peritos Traductores e Intérpretes, así como las modificaciones a las leyes en pro de los derechos de las féminas.

La empresaria Grisel Castro Jure propuso la creación de una red de promotoras y defensoras de Derechos Humanos y de las Mujeres, con el objetivo primordial de erradicar la violencia familiar y la equidad de género.

El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) Raúl Plascencia Villanueva, aprobó esta propuesta y ofreció las instalaciones de la Comisión para que sea utilizada como sede de esta red, donde además las integrantes podrán realizar reuniones, así como recibir y proporcionar cursos de capacitación y promoción de los derechos humanos.

Al evento asistieron los Consejeros de la Codhey, Marcia Lara Ruiz de Moreno, Miriam del Carmen Jure Cejín, José Inés Loría Palma, la consejera del Poder Judicial, Melba Méndez Fernández, la titular del Instituto estatal de prevención del delito, Verónica Camino Farjat, las empresarias Grisel Castro Jure, Karina Pérez Ramos y Alis García Gamboa, entre más de 70 destacadas mujeres de la entidad.

Alerta obligatoria

La promotora del encuentro y presidenta de la Fundación Mujer, Miriam del Carmen Jure Cejín, manifestó que gracias a la presión ejercida por la CNDH y por grupos ciudadanos se cuenta con una legislación actualizada en la materia.

Sin embargo, precisó, el camino de las reivindicaciones femeninas ha sido escabroso y se mira de largo todavía, pero ante el desafío, tenemos la obligación de continuar alerta, en pie de lucha sin bajar la guardia, para corregir los graves errores culturales, económicos, laborales, políticos, que pesan lapidariamente sobre las mujeres en toda la escala social.

“De la discriminación no hay mujer que se libre aun, ya sea social, sexual, laboral o económicamente. Por eso para acelerar los cambios es imperativo que las mujeres participemos en la vida pública de la Nación y en la toma de decisiones tanto en el diseño de políticas públicas como en los programas y proyectos gubernamentales federales, estatales o municipales, los que para llamarse democráticos deben incluir en forma protagónica y abierta la participación del 51 por ciento de la población total del país”, añadió.

El presidente de la Codhey precisó a las presentes que la defensa de los Derechos Humano de las mujeres se demuestra con hechos concretos y acciones para erradicar flagelos como la violencia.

Falta independencia y autonomía

El Ombudsman de Yucatán reconoció la trayectoria de las asistentes en la lucha por los derechos de las mujeres, sin embargo, dijo que esa independencia y autonomía es algo que no todas las yucatecas gozan.

Por lo que hizo un llamado a llevar el mensaje de la no violencia hacia la mujer para alcanzar el desarrollo de la sociedad,  pues es precisamente la desigualdad lo que origina este fenómeno.

Por su parte, el presidente de la CNDH reiteró que, bajo ninguna circunstancia, se puede justificar la violencia, por el contrario, es necesario hacer visible este problema que afecta a una gran parte de la población del país.

Reconoció que México está a la vanguardia en legislación, y tiene “las mejores leyes del mundo” en la materia, sin embargo,  es necesario difundirlas para que las mujeres puedan ejercer sus derechos.

Plascencia Villanueva, ante los planteamientos de las mujeres asistentes, se comprometió a reforzar la difusión y promoción en prevención de la violencia hacia la mujer en Yucatán, pero sobre todo, a trabajar de manera coordinada con la sociedad civil para hacer llegar el mensaje hasta las comunidades más pobres y marginadas.