Luis Fuente/MÉRIDA
Agobiado por su adicción a las bebidas embriagantes y a las drogas, el joven Wilberth Manuel C.L., de tan sólo 20 años de edad, se ahorcó en su casa en la comisaría San Francisco Manzanilla del municipio de Dzidzantún, al oriente del Estado. 

Este fallecimiento se convierte en la muerte autoinfligida número 106 en lo que va de 2019 en Yucatán. 

De acuerdo con los datos recabados, alrededor de las ocho de la mañana, el padre del joven salió de su vivienda ubicada en la calle 12 entre 21 y 23 de la comisaría San Francisco Manzanilla, para ir a Dzidzantún a realizar unas compras, por lo que dejó solo a su hijo Wilberth Manuel. 

El caso es que cuando el señor regresó de sus diligencias, al entrar al domicilio halló a su hijo ahorcado con la soga de una hamaca. 

Como pudo, el señor descolgó a su hijo y pidió ayuda al comisario municipal, quien reportó los hechos al número de emergencias 911. 

En minutos llegaron paramédicos, pero sólo pudieron confirmar que el muchacho había muerto, por lo que se pidió la intervención de la Fiscalía General del Estado (FGE). 

Posteriormente, arribó personal del Ministerio Público y Servicios Periciales de la FGE, con sede en Motul, para efectuar el levantamiento del cadáver. 

La autopsia realizada por el Servicio Médico Forense confirmó que la causa de la muerte fue asfixia por suspensión.