Patricia Itzá/Mérida
Personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) realiza trabajos de reestructuración y de inspección en la zona arqueológica de Chichén Itzá, con el fin de detectar nuevos vestigios.

En estos momentos se trabaja en los edificios de juego de pelota, templo de los guerreros y la “iglesia”, donde se realizan restauraciones para su conservación y mantenimiento.

El director del Patronato de las Unidades Culturales y Turísticas del Estado de Yucatán (Cultur), Mauricio Díaz Montalvo, dijo que trabajan de manera cercana con le dependencia federal, al ser ellos los expertos en esos trabajos, a pesar de que los terrenos de la zona le pertenecen al Estado.

“De manera puntual personal del INAH trabaja para inspeccionar la zona para determinar en dónde habría una ampliación, hay que recordar que tiene vestigios que todavía no se descubren, pero ahí están”, señaló.

Dijo que cuando son trabajos específicos y se requiere de personal profesional, como arqueólogos, se llama a la dependencia federal, ya que “se tiene que tener mucho cuidado con lo que se hace en ese sitio”.

De igual manera, afirmó que, de igual forma, se realizan estudios conjuntamente con el INAH, para el mejoramiento del parador turístico.

“Ellos hacen estudios del lugar y los trabajos se realizan hasta que nos digan qué es factible hacer y cómo hacerlo para no dañar el sitio, debido a que hay que tomar en cuenta que es patrimonio de la humanidad”, explicó.

Indicó que hasta que se tengan los resultados de los estudios se presentará un proyecto de renovación y esperan que sea pronto debido a que no tienen fecha para la entrega de las conclusiones.

Se espera que el proyecto tenga un presupuesto de cien millones de pesos, que es lo que pretendía invertir la administración anterior.