José Salazar/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- El mayor número de personas acude al dentista o al estomatólogo cuando el dolor que sienten ya es insoportable; sin embargo, existe una forma de evitar las diversas molestias e incomodidades generadas por las enfermedades bucodentales: el hábito de limpieza diaria y un chequeo dental en forma periódica.

En Yucatán, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) otorga durante un día típico 539 consultas en el servicio de estomatología y 81 consultas en el programa IMSS-Prospera.

Gabriel Peraza Gallareta, coordinador de Estomatología del IMSS Yucatán, indicó que aún hay personas a las que no les gusta acudir al dentista; sin embargo, existen muchas razones para visitarlo habitualmente, como la prevención de padecimientos como la caries y la gingivitis, así como el mal aliento y la pérdida de piezas dentales.

Indicó que el chequeo dental es definido como “el conjunto de acciones coordinadas de promoción, detección, protección específica y limitación de daños en los dientes y en las mucosas de la boca”.

Explicó que este procedimiento consta de cuatro pasos; en la primera etapa el estomatólogo sólo requiere que el usuario responda preguntas sobre los hábitos de alimentación y de higiene.

Posteriormente, recurre a la revisión y exploración de la boca para detectar alguna anormalidad en los órganos dentarios.
En la tercera fase el especialista realizará al usuario una “limpieza dental” y durante el chequeo también se enseña la técnica correcta del cepillado y el uso de auxiliares de limpieza.