Cecilia Silveria/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- La legalización de la marihuana para fines recreativos puede elevar los costos de atención por parte del Estado, pues no garantiza  una disminución en su consumo, señaló Víctor Roa Muñoz, director del Centro Integración Juvenil (CIJ) de Mérida.

"Está comprobado que en 25 estados del país, entre ellos Yucatán, se consume más marihuana entre los jóvenes, incluso más que el tabaco y el alcohol”, añadió.

En ese sentido, reiteró que en países como Estados Unidos y Uruguay, donde se ha legalizado el uso, y en donde lejos de disminuir el número de sus consumidores, incluso se ha duplicado.

Y países de Europa como Holanda, está dando marcha atrás a esta política liberal sobre el consumo de drogas, porque se convirtió en la capital mundial del narcoturismo, donde se incrementó el consumo de esta droga y otras mucho más fuertes. 

Entre las consecuencias de legalizar la marihuana destaca el previsible aumento de los gastos de salud pública, así como la posibilidad de que aumenten la delincuencia y violencia asociados al uso de las drogas. 

El director del CIJ indicó que durante el Congreso Internacional contra las Adicciones que concluyó apenas el fin de semana en la Ciudad de México, se llegó a varias conclusiones entre ellas ‘la primera recomendación para todos los países que participamos, fue la de garantizar un nivel adecuado de prevención, tratamiento y rehabilitación, porque esto es 10 veces más barato que combatir sus consecuencias’, dijo.

‘Pero para poder lograr lo anterior tenemos primero que fortalecer la infraestructura médica para tratar mejor a los adictos que requieren hospitalización para su recuperación, así como también se necesita capacitar mejor al personal de las clínicas para que puedan ofrecer un servicio integral para la rehabilitación y la reinserción social de las personas con problemas de adicción’, añadió. 

Roa Muñoz reconoció que el uso de la hierba  aumentó entre los jóvenes yucatecos, que ahora se inician a edades más tempranas en su consumo, lo cual constituye un llamado de atención.

También, dijo, que la más reciente Encuesta Nacional sobre Adicciones arrojó como resultado que en México, 15 mil personas son adictas a algún tipo de droga, ‘dicha cifra es bastante suave, seguramente hay muchísimas más personas adictas, pero aún así y en el supuesto de que estas 15 mil personas quisieran rehabilitarse, el Sector Salud colapsaría, pues no está preparado para atender a tal cantidad de pacientes con este problema’, abundó.

Subrayó que la marihuana de hoy en día ya no es la misma que se consumía en la década de los 60’s o 70’s pues la de ahora es mucho más fuerte ‘hace 40 o 50 años esta planta tenía de un 3 a un 5 por ciento del compuesto químico thc y hoy en día tiene de un 20 a un 25 por ciento, mucho más concentrado’.

‘Por lo tanto los daños que ocasiona al cerebro de un adolescente es mucho mayor, tenemos datos de disminución de hasta un 8 por ciento en el Coeficiente Intelectual de los jóvenes consumidores de marihuana en comparación con los que nunca lo han consumido’, añadió.

‘Existen datos científicos que están disponibles para el público, donde se muestran los efectos dañinos de la cannabis para las personas y que únicamente debería ser suministrada para uso terapéutico y medicinal, como para los enfermos de cáncer, por ejemplo’. Cabe señalar que de acuerdo a datos de la OMS, en el mundo, sólo uno de cada seis de los 4.5 millones de adictos a la marihuana reciben atención para rehabilitarse, cifra que en América Latina se eleva a uno de cada 11.

‘Por lo que podríamos deducir que la legalización de la marihuana traería más perjuicios que beneficios para la sociedad, el sector salud, así como los jóvenes y sus familias en México’.