La crítica a los mass media

Si bien los comunicólogos de Yucatán (como los de cualquier lado) deben ser críticos de los medios y de la producción de contenidos

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En plática con un compañero comunicólogo hace unos días, criticaba él a los mass media (medios masivos de comunicación) del Estado, principalmente a los periódicos, debido, según expresó, a su falta de servicio social y de veracidad.

Sus palabras me preocuparon, debido a que mi amigo también se dedica a la docencia, lo que significa que se transmitirán estas ideas a las futuras generaciones de profesionales en medios de comunicación.

Si bien los comunicólogos de Yucatán (como los de cualquier lado) deben ser críticos de los medios y de la producción de contenidos, pienso que las críticas deben ser bien reflexionadas y fundamentadas. Tenemos que entender las realidades, contextos y fenómenos que rodean a los medios que a menudo ni siquiera son tomadas en cuenta. Creo que una crítica no pensada, a cualquier medio de comunicación, hace daño a todos.

Yo tengo una visión un poco biológica del los mass media y pienso en cualquiera de ellos como si fueran personas, con carácter propio y definido, con todo lo que ello implica. Tener personalidad te distingue y también es lo que te da fuerza y carácter. Pero también determina el cómo actuará uno ante ciertas circunstancias.

Recuerdo que escuché hace algún tiempo en un programa de radio local una entrevista a estudiantes de Comunicación que hablaban de la “perversidad” de los medios. Ante lo que decían, me preguntaba cómo podía ser posible que tomaran una carrera con la cual no concuerdan.

Si bien los medios de comunicación de Yucatán tienen algunas cosas que afinar, siempre he pensado que cumplen su labor informativa de la mejor forma posible. Estando en las filas de la redacción puedo por lo menos asegurar que Milenio Novedades lo hace, al verificar lo más correctamente posible las notas.

Entonces, volviendo a las críticas, creo que deben ser constructivas y los estudiantes y profesionales de la comunicación deben entender que si algo te molesta y afecta del sistema, la única forma de cambiarlo o mejorarlo es estando adentro. Si bien la cosa no es sencilla, el trabajo del comunicólogo en estos tiempos se torna todavía más difícil, debido a la presencia, fuerza e influencia que adquieren las redes sociales.

Recuerdo, de cuando estudié la carrera, a la profesora Elvira Sánchez Blake, quien había trabajado de periodista en Estados Unidos; creo que las experiencias que compartió conmigo y mis compañeros determinaron el camino que algunos tomamos, así de grande es la influencia de un profesor sobre los alumnos.

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