Esmeralda Espinoza/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La curiosidad y la búsqueda continua por aprovechar los recursos naturales y minimizar los impactos al medio ambiente, llevó a dos alumnas de secundaria a crear una pintura biodegradable para el interior de los hogares y cuya materia principal es el nopal.

Todo nació como parte de un proyecto de la clase de Ecología en el Instituto  Summerhill del nivel secundaria, donde las alumnas María Antonieta Ojeda Guevara y Isabel Arellano Chi, ambas de 14 años de edad, unieron su creatividad y su “olfato” de investigación para estudiar las propiedades de fijación del nopal al combinarlo con otros elementos.

Pintura biodegradable

Fue así como al unir cal, agua, sal y baba de nopal, surgió una pintura ecológica que podría suplir en un futuro a las pinturas convencionales que contienen químicos y elementos como el plomo, que en exceso daña el medio ambiente y afecta los pulmones de los seres humanos, así lo especifica la Organización Mundial de la Salud (OMS).

María contó emocionada los beneficios del descubrimiento, que ayuda a reducir la contaminación del medio ambiente y la afectación de la capa de ozono así como de los humanos que interactúan con las propiedades de las pinturas convencionales.

La pintura, que ya fue probada por los tutores de las alumnas que las ayudaron en el proyecto, sirve para pintar objetos de barro, el interior de las casas y piedras decorativas ya que es de larga duración. Hasta el momento puede durar varios meses, aunque les gustaría que más adelante algún laboratorio científico las apoyara para encontrar la manera de que dure por años.

Proceso de elaboración 

El método para crear la pintura es poner los nopales enteros y sin espinas en una olla con dos litros de agua hasta llevarlos al proceso de ebullición aproximadamente 20 minutos, después los dejan reposar durante 12 horas con todo y agua.

Mezclan aparte en un recipiente la cal, la sal y el resto del agua, mueven constantemente con una madera y, por último, agregan la baba del nopal hasta que la mezcla quede perfectamente incorporada; adicionan el colorante artificial para obtener el tono deseado.

Los alumnos han probado con verde, azul, amarillo y violeta, y al final obtienen una pintura que rinde siete litros y ahorra el 60% de dinero en comparación con el valor comercial de una pintura de agua.

“Al crear esta pintura ecológica nos damos cuenta que es posible disminuir el nivel de contaminación en el mundo, nos gusta lo que hacemos y es nuestro sueño llegar a ser científicas”, agregó Isabel.