Se aprovechan de la crisis para obtener 'jugosas' ganancias

La situación económica en la capital ha provocado que surja el denominado agiotaje inmobiliario.

|
En la zona centro de la capital se observan casas con letreros de “se vende”. (Benjamín Pat/SIPSE)
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Benjamín Pat/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- La situación económica por la que atraviesan las familias capitalinas ha provocado que, en pleno centro de la ciudad, se observen casas con letreros de “se vende”, lo que ha generado el agiotismo inmobiliario, es decir, el surgimiento de personas, despachos, incluso inmobiliarias, que aprovechándose de la situación ofrecen cifras inferiores al costo real para obtener, más adelante una jugosa ganancia.

Según algunos corredores de bienes raíces o agentes inmobiliarios, las personas con mayores posibilidades económicas ofrecen a los propietarios préstamos económicos con intereses que superan el 10 por ciento, haciéndolos prácticamente impagables.

En el caso de algunos despachos jurídicos y empresas inmobiliarias, el negocio consiste en realizar una oferta a los propietarios de la mitad del costo real de la vivienda, que aunque al principio es rechazada, en algunos casos y al cabo de un tiempo, finalmente es aceptada, ya que por la misma situación, no hay quién compre el inmueble al precio real.

En busca de lograr vender, los propietarios de viviendas hacen uso de todos los recursos disponibles. Tal es el caso de Internet. Tan sólo en una las páginas dedicadas a la publicación de anuncios, se encontraron por lo menos 116 ofertas en capital del estado, desde las más pequeñas hasta las más grandes, con precios que van desde los 400 mil pesos y otras alcanzando los cinco, siete y hasta 12 millones de pesos.

Incluso, algunas son anunciadas desde hace más de un año, sin que hasta la fecha hayan sido compradas al valor ofertado.

Esta situación no sólo se registra en el caso de familias económicamente acomodadas, sino que sucede lo mismo en el caso de familias que habitan viviendas de interés social, ya que a la par que crece la oferta de casas nuevas, también crece el número de personas que no pueden seguir pagando las mensualidades que exigen las instituciones bancarias y las sociedades hipotecarias.

Lo más leído

skeleton





skeleton