Benjamín Pat/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- El Congreso del Estado dio entrada a una iniciativa que busca reducir las tarifas de agua potable, así como para la eliminación de la facultad del prestador de servicio para suspender el suministro.

La propuesta fue presentada por la diputada Laura Beristáin Navarrete, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y propone también que los pagos por parte de los usuarios sean cada dos meses y no de manera mensual, como ocurre actualmente. 

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“Miles de familias se han visto afectadas por las altas tarifas en el servicio de agua potable que deben pagar mes con mes, por lo que resulta necesario establecer medidas para solucionar este problema”, señala el documento.

La iniciativa plantea la derogación del artículo 7 y reformas a los artículos 9, 20, 22, 25, 39, 41, 42, 46 y 46 bis, todas de la Ley de Cuotas y Tarifas para los Servicios Públicos de Agua Potable y Alcantarillado, Tratamiento y Disposición de Aguas Residuales del Estado de Quintana Roo.

El artículo que se propone derogar, establece que las cuotas y tarifas, se actualizarán mensualmente en la misma proporción en que lo haga el índice nacional de precios al consumidor.

Además señala que los precios de consumo doméstico, comercial, industrial, hotelero, de servicios generales a la sociedad y parques acuáticos, podrán ser actualizadas cada vez que exista un incremento en el costo de la energía eléctrica.

Estas serían las cuotas 

En el caso del artículo 25, la iniciativa es en el sentido de que el prestador “no” podrá suspender o limitar el servicio, en caso de incumplimiento del pago de las cuotas derivadas de la prestación de este.
En el artículo 39, la idea es que las cuotas básicas sean de entre 60.36 pesos a 200.30 pesos, contra 150.90 a mil 620 que establece actualmente el precepto legal. 

Los últimos artículos, 46 y 46 bis, proponen una reducción de 30% a sólo 15 % (alcantarillado) y de 5% a solo 2.5%  (servicio de saneamiento).

Para Beristaín Navarrete se trata de poner orden y evitar, principalmente en el norte del Estado, que la empresa Aguakán, concesionaria del servicio, siga cometiendo abusos.