Ángel Castilla/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Las heces fecales de mascotas en la vía pública, que los dueños por lo general no recogen, se introducen al organismo del ser humano por medio de la respiración, o al ingerir alimentos preparados en la calle, lo que causa graves trastornos que incluyen infecciones por parásitos.

Omar Daniel Meza, coordinador del programa estatal de Zoonosis, dijo que la Secretaría de Salud (SESA), informó que desafortunadamente la mayoría de las personas que sacan a pasear a sus mascotas o hacer ejercicio, no tienen el hábito de echar en una bolsa el excremento.

“Si vemos que el dueño de la mascota no recogió las heces, necesitamos pedirle que por favor la embolse, y si hace caso omiso, pues entonces necesitamos denunciar a la persona ya que reglamento de Bando y Gobierno municipal, señala que existen sanciones para estas personas”.

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Las enfermedades que se originan a partir de las heces de los animales, se llaman enfermedades zoonóticas, son de tipo parasitarias, producidas por quistes, huevos o larvas de protozoarios (organismos unicelulares) y gusanos.

Estos parásitos penetran al organismo por ingestión de los huevos al manipular los calzados, juguetes y objetos que estuvieron en contacto con los excrementos.

Participación activa 

El coordinador del programa estatal de Zoonosis de la SESA, señaló que para minimizar este problema en la vía pública, se necesita de la participación de la ciudadanía en general, tanto de los dueños de las mascotas como de los transeúntes.  

Indicó que el excremento de perros y gatos debe de ser desechado de una correcta manera, y con estas acciones, evitar que la materia fecal que se deja en la vía pública se seque y transforme en polvo, el cual, ensucia no sólo el aire, sino también depósitos de agua y alimentos; aprendamos a colaborar en esta labor ambiental y de salud.

El Reglamento del Juzgado Municipal de Othón P. Blanco, en el Capítulo VI de las infracciones y sanciones, artículo 37, referente a infracciones en materia de ecología y medio ambiente,  en el apartado X, señala que la omisión por parte de los propietarios de animales domésticos, de recoger las heces fecales que éstos evacuen en la vía pública, se sancionarán de 44 a 55 salarios mínimos.