Esmeralda Espinoza/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Cerca de 60 mil obreros de la construcción en Quintana Roo no están afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ni a otro tipo de empresa privada que les proporcione seguridad social y médica. Este grupo labora de manera temeraria al saber que en cualquier accidente la responsabilidad recaerá en sus espaldas. 

Una vez contratado el personal, los empleadores tienen hasta 90 días para afiliarlos, si no lo hacen en el tiempo que estipula el contrato colectivo de trabajo y de no ser supervisados por el personal de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS), se deslindan de su responsabilidad, de lo contrario la multa no rebasa los 20 salarios mínimos por obrero, razón por la que no se preocupan en dar este beneficio a sus trabajadores, aseguró José Juan Chilón Colorado, líder del Sindicato de Trabajadores, Obreros y Empleados de la Construcción. 

En la entidad laboran 75 mil trabajadores de la construcción, pero el beneficio es para unos cuantos que tienen la suerte de contar con el respaldo de algún sindicato, comentó.

Sobre el sindicato al que representa con cuatro mil 500 adscritos, aseguró que la mayoría está afiliado al IMSS porque el sindicato ha ejercido presión en los empresarios. 

“Los contratos colectivos que se registran en la Junta de Conciliación y Arbitraje tienen implícita la obligación que tiene el patrón para dar de alta al trabajador en el IMSS, pero algunos burlan las leyes”.

Desde el 2005 ha pegado a los obreros la evasión de sus patrones. En ese entonces cuando había alrededor de 300 mil empleados, 115 mil no estaban afiliados. 

Muchas veces como la mayoría de los obreros provienen de algunas comunidades rurales de Chiapas, Tabasco y Veracruz, no conocen las leyes y por eso no saben qué hacer cuando se encuentran entre la encrucijada de “tener un trabajo con seguro social o estar desempleados”. 

En materia de evasión no se han logrado grandes avances, lo único bueno es que en los últimos años las carencias que tienen los obreros han sido un tema tocado por medios de comunicación y algunas dependencias estatales y federales, sin embargo a nivel municipal falta mucho por resolver, manifestó Chilón Colorado. 

Recuerda que hace unos años propuso que se creara una Dirección de Seguridad e Higiene en el Ayuntamiento de Benito Juárez, tal como el resto de las direcciones existentes para poner un alto a esta situación que afecta a miles de familias. 

Considera que la situación empeora porque la Dirección de Desarrollo Urbano no notifica a la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) el nombre de las personas físicas o morales a las que extiende licencias de construcción, de lo contrario habría un mejor control para que la STPS supervisara a todas las compañías sobre la correcta aplicación de los derechos del trabajador. 

Señaló que por cada licencia de construcción que emiten hay como mínimo cinco empleos. Al respecto, Humberto Aguilera Ruiz, director de Desarrollo Urbano, mencionó que no cuenta con estadísticas precisas sobre este tema, ya que cada mes varía el número de solicitudes que puede ir desde las 15, 20 o más. 

“Un sindicato tiene la obligación de defender al trabajador jurídicamente hablando, pero las dependencias también deben poner de su parte”, agregó el líder de los obreros.