Javier Ortiz/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.-  Albino Enríquez Martínez, presidente del Comité Estatal de Fomento y Protección Pecuaria, indicó que en los próximos días establecerán un cerco zoosanitario en los municipios de Othón P. Blanco y Bacalar, que incluye vacuna masiva de animales y captura de murciélagos, principales transmisores de la rabia paralítica, para la cual cuentan con un presupuesto de nueve millones 829 mil pesos.

Dijo que establecerán un perímetro de 20 kilómetros de la ribera del río Hondo, hacia suelo mexicano, así como en poblaciones del municipio de Bacalar, donde se han presentado casos de rabia paralítica transmitida por la mordedura de murciélago, particularmente en la comunidad de Otilio Montaño, perteneciente al municipio bacalarense. Indicó que en esta comunidad y en las aledañas como Río Verde y Zamora, entre otras, se capacitará al menos a dos productores ganaderos por cada población para que auxilien con la captura de los quirópteros.

Precisó que a los interesados, se les suministrarán además de los conocimientos necesarios, las redes y demás implementos que requieran para descartar la presencia de estos animales, considerados los principales transmisores de la rabia paralítica en el hato.

Enríquez Martínez, señaló que con estas medidas de sanidad se pretende mantener el estatus garantizado en Quintana Roo, para lo cual cuentan con un presupuesto total de nueve millones 829 pesos para esta labor. Agregó que de ser necesario “conseguir los recursos extra que se requieran para que no baje el estatus sanitario que mantenemos”, insistió. Abundó que en la zona de alto riesgo, como Sergio Butrón Casas, se realizarán muestreos de sangre para detectar casos de tuberculosis y brucelosis en los animales; además, se aplicarán vacunas para proteger el ganado de esa zona.

Puntualizó que se dispone del recurso, pero no se escatimarán las gestiones para adquirir las vacunas requeridas como sucedió el año pasado, cuando se programaron 15 mil vacunas y se aplicó el doble.