Oskar Mijangos/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El parchar las avenidas de Cancún sólo aplaza el problema de los baches, siendo una de las principales quejas de ciudadanos en diversas zonas como la Supermanzana 29, donde huecos cubren el pavimento por trabajos de mantenimiento de Aguakan.

Vecinos como Justo "N", habitante de la citada supermanzana, “no ve con buenos ojos” que los trabajadores de Aguakan rompan el pavimento y luego no lo reparen. “He visto que hacen lo mismo en otras avenidas, acaban de pavimentar y a los días ya hicieron un boquete, luego sólo le ponen tierra pintada para tapar el hueco”.

Un parcha está destinado a destaparse a la brevedad 

Jorge Poot Pérez, ingeniero civil y ex presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Quintana Roo, señala que para que el pavimento resista los embates del tiempo y el paso de los automóviles, se necesitan varios estudios y que todo se construya a la par, ya que un parche presenta una resistencia diferente al resto del suelo y está destinado a destaparse a la brevedad.

Si un bache aparece y es detectado antes de ocupar dimensiones más allá de un carril, un parche es viable, pero si se trata de uno cuyas dimensiones rebasan el ancho de la vialidad, lo único que se logra es una solución momentánea.

El secretario de Obras Públicas y Servicios del Ayuntamiento, Roger Espinoza Rodríguez, señaló que revisarán las calles que han sido recién pavimentadas para comprobar que están resistiendo y no presentan baches, dando prioridad a la avenida Tulum y al tramo que comprende desde el distribuidor vial hasta el cruce de la avenida José López Portillo con Kabah.

Personal operativo de Aguakan dice es inevitable romper el pavimento, ya que al colocar el asfalto nuevo, la presión de las máquinas daña la tubería, causando fugas, por lo que es necesario abrir de nuevo la vialidad para cambiar el tramo dañado.