Redacción/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El Centro de Justicia para Mujeres (CJM) de Quintana Roo, localizado en la Región 94, que se encargaría de dar atención integral a mujeres víctimas de violencia, no está funcionando de acuerdo con autoridades de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra la Mujer (Conavim) que encontraron algunas inconsistencias en el edificio, en una inspección realizada a mediados del 2014. Mientras, cuatro centros, uno de ellos, el de Campeche, ya están en operación desde hace un año.

Al edificio le hicieron falta el área en la cual la víctima no tenga contacto visual con su agresor, zonas para detenidos, salas de juicios orales, zona de lactancia, por mencionar algunos, que es lo que requiere un centro modelo como lo establece la Conavim.

Los inspectores también señalaron que el edificio debe tener una fachada de casa y no de oficinas, a su vez que no debe tener ventanas o puertas grandes de cristal. El CJM tiene en la entrada puertas de cristal y ventanales grandes.

Proyecto iniciado en 2013

La construcción de dicho centro inició en el 2013, donde anteriormente se encontraban las instalaciones de la agencia del Ministerio Público del Fuero Común (MPFC) de la Región 94 y las oficinas de la comandancia de homicidios de la Policía Judicial del Estado (PJE), que se ubica sobre la avenida Miguel Hidalgo (Ruta 4).

El edificio ya está concluido, pero las fiscalías de Atención a la Mujer y de Delitos Sexuales no tienen conocimiento de cuando entrarán en funcionamiento las oficinas, ya que carecen aún de mobiliario

En el 2014, la Fiscalía Especializada en Atención a la Mujer cerró con 793 denuncias por violencia familiar, mientras que la Fiscalía de Delitos Sexuales concluyó con 608 denuncias iniciadas contra mujeres, desde niñas hasta mayores de edad.

Existe una comisión dentro de la Conavim que supervisa los centros en toda la república mexicana cuando ya están concluidos. Sus miembros realizan inspecciones para ver si el modelo va acorde a los parámetros establecidos.

Evalúan el Centro de Justicia para Mujeres

Dicha comisión visitó el centro de Cancún a mediados del 2014 y marcó los reajustes para el lugar. El inmueble deberá apegarse a los lineamientos urbanos y arquitectónicos publicados por la Conavim, los cuales marcan que en el diseño del Centro de Justicia para Mujeres deben considerase dos áreas que tengan accesos diferentes para evitar que puedan encontrarse la mujer víctima de violencia y su agresor, el cual no lo contemplaba en proyecto de Quintana Roo.

Cada centro deberá tener una recepción, sala de espera con estación de café, cubículos de entrevista inicial, estancia de atención infantil y sala de lactancia, casa de emergencia, consultorio médico, cubículos para el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), oficina para el Instituto de la Mujer, salas para terapia individual y grupal, sala de juntas, cámara de gesell, cubículo para Ministerio Público del Fuero Común (MPFC), Seguridad Pública, abogados que brinden asesoría gratuita y representen a la víctimas, zonas para detenidos y salas de juicios orales.

Actualmente los Centros de Justicia para Mujeres que se encuentran funcionando con las condiciones aptas son los de Chihuahua, Campeche, Chiapas y Oaxaca, los que están próximos a entrar en funciones son el de Guerrero y Puebla.

PGJE se encarga de los casos

El seguimiento y tratamiento que les dan a mujeres víctimas de violencia o violación es en la PGJE donde reciben su denuncia y se les canaliza al médico legista para que sean valoradas.

Las que son víctimas de violación son enviadas a la Jurisdicción Sanitaria, que a su vez las traslada al Hospital General donde reciben los primeros medicamentos retrovirales y la pastilla del día siguiente para evitar alguna enfermedad de transmisión sexual o embarazo.

Sus datos se manejan de manera confidencial, cuando la integridad de la víctima está en peligro y si solicita protección por parte de la dependencia estatal, se le brinda. El año pasado proporcionaron seguridad a tres víctimas de violación.

El seguimiento que se le da posteriormente es canalizarlas con redes de apoyo como el Instituto Quintanarroense de la Mujer (IQM), asociaciones civiles, entre otros organismos.