Edgar Olavarría/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La Auditoría Superior de la Federación (ASF) fiscaliza el Fondo de Aportaciones para la Educación Tecnológica y de Adultos (Faeta), asignado al Instituto Estatal para la Educación de Jóvenes y Adultos (IEEA) por el orden de 139 millones de pesos, correspondiente al ejercicio fiscal 2017, dentro de la administración del exdirector general, Rafael Quintanar González, no obstante, el Órgano Superior de Fiscalización de Quintana Roo indaga sobre los gastos devengados bajo los rubros de capacitación, asesoría, cursos e incorporaciones, lo anterior ante el posible desvío de alrededor de siete millones de pesos, según las indagatorias coordinadas con la Secretaría de la Gestión Pública (SGP), la mecánica consistía en inflar los presupuestos reportados.

De acuerdo con Manuel Palacios Herrera, responsable interino de la Auditoría Superior de Quintana Roo (Aseqroo), el IEEA forma parte del conjunto de instituciones que deben fiscalizarse en apego a la normatividad, procedimientos y técnicas de la propia fiscalización de la cuenta pública, sin embargo, destacó que se lleva a cabo una auditoría coordinada con la ASF sobre el recurso que se recibe a través del Ramo 33 y naturalmente el egreso e ingreso de la institución.

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A raíz de que el 80% de los recursos previstos en el presupuesto del IEEA proviene de las Aportaciones Federales para Entidades Federativas y Municipios (Ramo 33), en función de servicios personales y de educación, así como sobre la plantilla laboral, estos se auditan meticulosamente por personal de federación, ya que en el lapso de ocho meses que Quintanar González estuvo al frente fueron detectadas diversas irregularidades respecto a la comprobación de gastos, facturas y presupuestos reportados sobre incorporación de asesores y/o personal.

No obstante, Palacios Herrera señaló que esta revisión obedece a la operatividad de la Aseqroo sobre los tres poderes del estado, organismos públicos descentralizados, entidades paraestatales, fideicomisos, centros autónomos, municipios y entidades paramunicipales.

La auditoría no sólo involucra a la ASF y Aseqroo, sino también a la SGP, que a raíz de la renuncia de Quintanar González, se han detectado inconsistencias sobre partidas relacionadas con cursos, capacitaciones, incorporación de asesores y jornadas operativas, presupuestos que resultaban fáciles de “inflar” y que repercutían directamente en el recurso que canalizaba la federación, en ese sentido, fueron reportadas capacitaciones sin llevarse a cabo, cursos de bajo costo reportados por arriba de 10 mil pesos, creación de jornadas de capacitación y campañas para contratar personal, todo ello justificado indebidamente o fuera de los propios procedimientos del Faeta.

El presunto desvío de recursos por el orden de 7 millones de pesos, que impactó las partidas del Faeta, ha propiciado que se lleve a cabo una revisión minuciosa en todas las coordinaciones del IEEA, inicialmente en Chetumal, Felipe Carrillo Puerto y Cancún, que ha permitido detectar faltantes en la operatividad del IEEA en Othón P. Blanco y Benito Juárez.