Claudia Martín/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- “Las prisas…”, esta es una de las excusas más recurrentes de los ciudadanos chetumaleños para justificar que conducen a exceso de velocidad, irrespetan los señalamientos de tránsito y ocupan lugares de estacionamiento restringidos, todo ello contenido en un añejo, pero vigente Reglamento de Tránsito que data de hace más de 20 años.

El teniente coronel retirado, Carlos Briseño Villagómez, director de Tránsito en el estado, estimó que la mayoría de los conductores en Chetumal no respeta el Reglamento de Tránsito, aunque probablemente sea el hecho de que no lo conocen.

“No sé que nos pasa a los chetumaleños… Somos rejegos para acatar un reglamento. Nos levantamos tarde para ir al trabajo y siempre andamos a las prisas. Por eso no respetan los límites de velocidad”.

Pero ese es sólo una de las tantas omisiones que muchos ciudadanos chetumaleños cometen a diario, desde las vueltas prohibidas hasta el estacionamiento en las banquetas, donde la autoridad vial, que aquí compete al estado, simplemente pareciera ignorar, cuando lo que procede es la infracción, coincidieron en comentar vecinos de distintas colonias y de diferentes estratos.

“Aquí los vecinos montan sus vehículos totalmente sobre la banqueta. Alguna vez le comenté a uno de ellos que si no sería una muestra de civilidad permitir que la gente transite libremente por las banquetas y sólo me respondió sí ¿verdad? Al sol de hoy sus carros ocupan la banqueta y no hay autoridad se acerque siquiera para reconvenirlo”, expresó un vecino de la colonia Miraflores, que prefirió evitarse problemas con sus vecinos y omitió su nombre.

Lo mismo sucedió en diferentes colonias, donde los talleres mecánicos parecen dueños de las calles, dijo doña Bertha Alarcón, de la colonia Payo Obispo.