Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Un grupo de aproximadamente cuarenta ejidatarios de Bacalar y Aarón Merino Fernández, se plantaron en los bajos del palacio municipal, porque están en contra de que bacalar sea declarada Área Natural Protegida.

Filiberto Buitrón Hernández, presidente del comisariado ejidal de Bacalar, indicó que ejidos como Calderitas y Felipe Carrillo Puerto, con sus áreas protegidas como el Santuario del Manatí y Reserva de la Biósfera de Sian Ka’an, “se están muriendo de hambre porque no pueden explotar de manera sustentable sus recursos naturales y no queremos que eso le suceda a nuestras familias”, dijo airadamente.

También te puede interesar: Turisteros de Bacalar apoyan creación de área protegida

Los parcelarios se plantaron por espacio de dos horas bajo el incandescente sol, mientras los integrantes del comité de cuenca del sistema Lagunar de Bacalar sesionaban en el interior del palacio municipal, mismo que está integrado por representantes de la Semarnat (Secretaría de Medio Ambiente Recursos Naturales), Profepa (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente), ecología en sus niveles estatal y municipal, así como de asociaciones civiles y ambientales.

Edmundo Gómez Trejo, integrante del ejido “Aarón Merino Fernández”, indicó que no los pueden condenar a la pobreza de sus familias por intereses de grandes empresarios del norte del estado, porque a eso está encaminada la declaratoria de Área Natural Protegida de la laguna, consideró.

Culpó a la asociación “Amigos de Sian Ka’an” de impulsar esta iniciativa por intereses de grandes empresas monopolizadoras, “nos van a querer imponer lo que debemos hacer con nuestras tierras, para construir en nuestros terrenos que pedir permiso”, dijo.

Los ejidatarios  permanecieron con mantas de consigna en contra del secretario de Ecología y Medio Ambiente (Sema), Alfredo Arellano Guillermo y representantes de asociaciones civiles que comparten la idea.

Los ejidatarios aseguraron que de continuar esta iniciativa, arreciarán sus protestas con habitantes del municipio de Felipe Carrillo Puerto y otros municipios que viven sumidos en la miseria a pesar que cuentan con posibilidades de explotar de manera sustentable sus recursos naturales.