Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- El Procurador Federal, Guillermo Haro Bélchez, inauguró las oficinas de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en la ciudad de Bacalar, en medio de un reducido número de invitados.

Al corte de listón estuvo presente también la delegada de esa dependencia en el estado, Carolina García Cañón; el secretario de Medio Ambiente en el estado, Alfredo Arellano Guillermo y el secretario del Ayuntamiento de Bacalar, Guillermo Tun Ruíz.

También te puede interesar: Multa millonaria a menonitas por deforestación de selva

Prestadores de servicios turísticos y representantes de la sociedad civil, lamentaron que se haya marginado a los bacalarenses de la oportunidad de plantear a las autoridades federales la devastación que se lleva a cabo en la Laguna de los Siete Colores.

David Martínez Sánchez, presidente de la Asociación de Hoteles y Restaurantes de Bacalar, señaló que no se invitó a los integrantes del Comité de Cuenca, órgano creado para encauzar acciones en beneficio del cuerpo lagunar, lo que consideró lamentable.

Subrayó que se perdió la oportunidad de pedirle enérgicamente al Procurador Federal, que se haga valer la ley, que dejen de prostituirla con fines únicamente recaudatorios y a la conveniencia de los potentados económica y políticamente.

Filiberto Buitrón Hernández, presidente del comisariado ejidal de Bacalar, dijo que una de las primeras acciones que deben emprender esas oficinas recién inauguradas, es la revisión al relleno de 10 hectáreas de manglar que se llevó a cabo a orillas de ese cuerpo lagunar, en un predio que supuestamente estaba destinado para los maestros pero que “extrañamente” alguien se lo adjudicó.

Dijo que se percataron del ecocidio, durante una revisión que llevaron a cabo en fecha pasada junto con actuarios del Tribunal Agrario, como parte de las diligencias ordenadas por dicha instancia por el juicio que llevan a cabo para la recuperación de sus tierras.

Herbert Ic Rodríguez, representante de la IAP “Bacalar Consciente”, subrayó que despierta suspicacia el hecho que los funcionarios federales hayan marginado a los representantes de la sociedad civil en un evento de esta magnitud, sobre todo porque ha sido una demanda sentida de la población contar con la representación de dicha dependencia; confió que cumpla con lo que dicta la ley para la preservación del ecosistema lagunar. Las oficinas está ubicadas a un costado del Mirador Norte a la salida de la ciudad.